Las buenas noticias en la enfermería del Eibar llegan en grupo. Aunque estaba previsto que este parón de selecciones iba a ayudar a la plantilla armera a recuperar varios efectivos con problemas físicos, las noticias son aún mejores de lo esperado. Y es que varios jugadores a los que no se esperaba hasta la semana que viene ya están entrenando e incluso, como el caso de Paulo Oliveira, con el alta médica. El central luso ya se entrenó este miércoles al nivel del grupo por lo que las molestias que le hicieron ser baja frente al Real Madrid están olvidadas.
También empezaron a entrenar, aunque solo realizando carrera continua Sergio Álvarez y Rober Correa. Tanto el asturiano como el catalán parece que podrán empezar la semana que viene a preparar la visita a Ipurúa del Alavés con el resto del grupo. Por lo que serían tres caras nuevas con las que Mendilibar ya podría contar de vuelta para sus planes. Sin duda, un alivio para el técnico de Zaldívar.
Ramis, la gran duda
La gran incógnita se mantiene respecto a Iván Ramis. El veterano defensa no acaba de encontrar el buen tono físico por una serie de lesiones musculares. No parece probable vaya a regresar pronto al grupo. El balear de 35 años es muy importante para Mendilibar como el propio técnico ha reconocido en ocasiones, pero si esto se prolongase, y dado que el técnico armero no cuenta con Esteban Burgos, podría incluso motivar que el Eibar acudiese al mercado invernal en busca de un central. La dirección deportiva de Fran Garagarza ya contempla esta posibilidad, aunque, de momento, se confía en la recuperación de Ramis.