Este año 2019 ha sido un año repleto de cambios para el conjunto ibicenco. Dichos cambios se empezaron a efectuar desde que el equipo aterrizara en Segunda ‘B’ la temporada anterior. A falta de dos semanas para empezar la competición, Amadeo Salvo consiguió adquirir la plaza que dejaba el Lorca para así llenar ese hueco vacío en el Grupo IV. Desde entonces las cosas se tuvieron que hacer a prisa y corriendo, por lo que los resultados tardaron en llegar.
La primera vuelta fue un tanto irregular, no terminaba el equipo de encontrar su estilo, pero aun así, acabarían en esta primera mitad de competición en octavo lugar. Poco después, el 30 de enero de 2019, el fichaje estrella con el que dieron el salto a la categoría de bronce, Marco Borriello, decidiría colgar las botas y poner fin a su encomiable carrera como futbolista. Tras ganar dos Series A, una Supercopa de Europa y una Champions, terminaría recalando en su última temporada, a los 36 años, en el modesto Ibiza. Pero su paso por la isla fue difícil, y no acabó de cuajar en ningún momento, aunque siempre se le recordará con cariño en las gradas de Can Misses por su innegable compromiso con el club.
Unos se van, otros llegan
A la marcha de Marco Borriello, le precedieron otras tantas como las de Abel, Uru, Candelas, Herrera y Saenz, que se sumergirían en otros proyectos. Pero llegarían caras nuevas como las de Perdomo, Jordi Sánchez, Provencio, Raí, Giner, Albizua y Bonilla. Nuevamente, los resultados estaban tardando en llegar, y seguían los mismos problemas: la falta de regularidad, sobre todo fuera de casa. De local el cuadro de Palop se mostraba sólido, pero de visitante la situación daba un giro de 180º. Como visitante, se estaban empezando a dar serios síntomas de debilidad. Daba la sensación de que se jugaba al «cerocerismo», y con los movimientos que se habían hecho en invierno, resultaba inadmisible.
Tras unos resultados negativos y una imagen muy débil fuera de casa, el club decidió proceder a la destitución de Palop. Esta decisión generó cierta controversia entre los aficionados, que tenían opiniones muy divididas. Y es que a pesar de la mala imagen que llevaba arrastrando el equipo durante varias semanas consecutivas, los números con Palop al frente son positivos: 34 puntos en 21 partidos y séptimos en la clasificación, a ocho puntos del PlayOff.
Llega el relevo para comandar el banquillo celeste: Pablo Alfaro
El 28 de febrero llegaría Pablo Alfaro como nuevo entrenador del Ibiza, en una situación delicada. Debutaría con un empate en casa frente al San Fernando, que en esos momentos se encontraba luchando por colarse en la zona alta. Los resultados llegaron relativamente rápido, parecía que había dado con la tecla. En casa seguían siendo fuertes, y ahora también lo eran como visitantes. Tras doce partidos con Alfaro al frente, los celestes solo perdieron un partido y obtuvieron 23 puntos; 14 como local y 9 como visitante, dando una imagen más que satisfactoria fuera de casa, llegando a ganar al Melilla; uno de los candidatos al título del Grupo IV en aquel entonces. Finalmente, a pesar de todas las adversidades que había de por medio, Alfaro aprueba de forma sobresaliente, y los insulares quedarían a tres puntos del PlayOff, en sexta posición y clasificados para la Copa del Rey.
Temporada 2019/20: vuelta a empezar, pero ahora con mayor margen de tiempo
La temporada 2019/20 se antojaba apasionante y muy ilusionante para los aficionados y el club. Después de una temporada llena de turbulencias y de cambios drásticos, debido a la falta de tiempo para hacer una buena planificación, los números fueron más que dignos y se aprobó con nota. Ahora, con mucho mayor margen para planificar la siguiente temporada, los presagios eran esperanzadores.
Hasta once jugadores abandonaron el club, y trece caras nuevas se incorporarían al proyecto. Algunas de mucho nivel, como es el caso de Diego Mendoza, proveniente del Atlético Huracán de la Primera División Argentina, y de Javi Lara, jugador con mucha experiencia en Segunda y Primera División Española. A estas dos altas se sumarían las de Quintanilla, Simeone, Toni Arranz, Alejandro Machuca, Morillas, Javi Pérez, Kike López, Rubén, Fran Carbià, Pep Caballè y Germán. De la remesa de fichajes del mercado de invierno de la temporada 18/19, solo conservaría su ficha Raí, el resto terminaría recalando en otros proyectos.
Cambio de grupo: del IV al I
El Ibiza debía mudarse al grupo que le pertenece geográficamente, pero tras una votación de la Comisión de Segunda B, se aprobaría otro tipo de distribución, y el Ibiza pasaría al extravagante Grupo I, con equipos de Madrid, Islas Canarias, Galicia, Asturias, Islas Baleares y Melilla. Los insulares debutaron en este grupo perdiendo por la mínima (3-2) fuera de casa frente a Las Palmas, pero las sensaciones del juego y actitud del equipo eran positivas, solo había que pulir ciertos detalles en facetas defensivas. En casa debutaría con victoria (2-0) frente al Rayo Majadahonda y daría un auténtico recital futbolístico, sin conceder la más mínima opción a un recién llegado de la categoría de plata y uno de los cocos del grupo.
La materialización de una buena planificación, empieza a dar sus frutos
La planificación para esta temporada se empezó a notar desde un principio, materializándose en puntos y un juego serio del equipo. Tras la primera victoria de liga frente al Rayo Majadahonda, el cuadro de Alfaro entró en una dinámica muy positiva, logrando encadenar siete partidos consecutivos sin perder. Finalmente, terminarían el año en tercer lugar, con 36 puntos, a solo cinco puntos del primer puesto. El año anterior a estas alturas, los ibicencos peleaban por no distanciarse más del PlayOff, y ocupaban la novena plaza de la clasificación, con 25 puntos, y a ocho de la zona noble. La mejoría de un año a otro es inenarrable, y en Ibiza están embriagados de una infinita ilusión, porque el sueño de los PlayOff cada vez es más vívido y palpable.
Jugadores destacados
El mallorquín Ángel Rodado es una máquina de hacer goles, y es la máxima referencia del cuadro ibicenco. Ya suma 11 goles en su cuenta particular, compartiendo pichichi de la categoría junto a Joselu (Racing de Ferrol) y Tony Gabarre (Atlético Baleares), todos pertenecientes al grupo I. Javi Lara es otra de las caras destacables del equipo, gracias a su aportación en el centro del campo. Desequilibrio, creación de juego, pases medidos al pie y el golpeo de balón, son las aptitudes que lo conforman como uno de los hombres más temidos de Alfaro.
En tareas defensivas, Rubén ha dado mucha seguridad con su solvencia a la hora de frenar las ofensivas rivales y la facilidad para sacar el balón con éxito desde abajo; Kike López, pudiendo jugar de lateral y extremo, es un puñal por la banda derecha, y un dolor de muelas para sus oponentes; la electricidad de Raí y Pep Caballè en el extremo derecho, deja paralizados a los defensas; y la serenidad en el centro del campo de Núñez y Arranz a la hora de distribuir el juego y procurar que no pasen los rivales, genera confianza y bienestar. Todo esto, sumado a los encargados de atajar los balones, Lucas y Germán, constituye un bloque sólido y compacto, difícil de penetrar.
La plantilla, en líneas generales, es muy completa, y no hay ninguna pieza que desentone. Todas las posiciones están cubiertas por varios jugadores del mismo nivel, que se disputan la titularidad cada semana. Por ello, son pocos los titulares fijos, lo que refleja una planificación brillante para la temporada 2019/20.