No hay que desistir hasta la confirmación que proporcionen las pruebas radiológicas. Pero la lesión de Ezequiel ‘Chimy’ Ávila en unas primeras exploraciones no denota nada bueno. Apenas diez minutos iniciada la segunda parte la rodilla izquierda del delantero argentino se torsionaba de forma extraña. Lo hacía solo, sin que la articulación fuese forzada por una entrada, choque o similar con un rival. El Sadar enmudecía y el jugador tenía que ser evacuado en camilla.
El propio Jagoba Arrasate decía tras el partido en el que su equipo se impuso al Levante (2-0) que las sensaciones de los médicos y las primeras exploraciones auguraban el peor de los designios: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Una de las peores lesiones posibles que puede haber en el fútbol y que de confirmarse dejará al ‘Chimy’ Ávila fuera del equipo para lo que resta de temporada y algo más. Como mínimo el jugador podrá estar listo para la pretemporada. Pero el tiempo de recuperación, fijado habitualmente entre 6 y 8 meses nunca es algo matemático.
No obstante aún hay opción a la esperanza. Todo queda pendiente de que las pruebas radiológicas puedan revelar una menor gravedad en la lesión hacer respirar aliviado a todos los estamentos del club rojillo. Esas es de esperar que se realicen a principios de la próxima semana. Hasta entonces a la afición rojilla no le queda más que rezar y confiar.