El Atleti B se reencuentra con la victoria pero no con el fútbol
Pírrica victoria del filial rojiblanco contra un Sanse que jugó bien pero definió mal
Sanse y Atleti B se medían en un duelo marcado por la necesidad de puntos para ambos equipos, siendo el objetivo de los locales el de salir de los puestos de descenso, mientras que el filial rojiblanco buscaría la victoria para reengancharse a la lucha por el liderato.
El inicio del partido no atendió a razones clasificatorias, pues fue el Sanse el que salió mejor plantado, y aún sin tener ocasiones verdaderamente reseñables, desactivó el ataque colchonero con sorprendente facilidad.
La defensa y el centro del campo no estaba siendo capaz de encontrar a los jugadores de ataque, y los Camello, Borja Garcés y Riquelme apenas habían entrado en contacto con la pelota.
Por su parte, pese a estar defendiendo bien, el Sanse se encontró una vez más con la misma falta de gol que el resto de la temporada, y la poca claridad de sus llegadas sumado al buen hacer defensivo del Atlético, se estaba traduciendo en un partido carente de ocasiones y por ende, de goles.
El jugador más activo del Sanse estaba siendo Mario, el lateral derecho casi estrena el marcador hasta en dos ocasiones. En la primera tras una buena combinación de su equipo disparó a portería, obligando a Álex a emplearse a fondo.
En la segunda aún se quedó más cerca del gol, cuando regateó a Álex en el área para disparar después a portería. Para su desgracia, un defensor del Atleti recuperó la posición y sacó el tiro bajo palos.
Llegaron así al descanso de un partido en el que el Sanse se estaba sintiendo muy cómodo y lo estaba reflejando en su juego.
El inicio de la primera parte tuvo bastante menos ritmo que el final de la primera, y hasta en minuto 17 no llegaría la primera ocasión de peligrosa, la cual acabaría en gol del Atleti B.
Prolongó Riquelme de cabeza para la carrera de Manu Sánchez, que se la puso rasa a Camello para que su remate pese a ser detenido por Irureta, valió para que el rechace le llegara a Clemente que anotó el primero del partido.
El tanto lejos de anestesiar al Sanse le dio más vida para buscar su gol, que habría llegado de no ser por las intervenciones de Álex.
Se iba acercando el final del partido y llegó la parte más fea y más alejada del fútbol, cuando una falta de Camello detonó una trifulca en el centro del campo que terminó con un aluvión de cartulinas.
La pequeña pelea sería la ultimo relevante de un partido que se terminaría llevando el filial rojiblanco por la mínima ante un peleón Sanse.