Sandro y Guardiola impulsan al Valladolid
El Valladolid venció al Espanyol por 2-1 gracias a los goles de Sandro y Guardiola. El conjunto pucelano escapa de la zona del descenso tras sumar tres puntos ante el colista, que jugó casi todo el partido con diez por expulsión de David López.
Partido espeso, de ritmo lento, motivado por la situación clasificatoria de ambos conjuntos, inmersos en la lucha por evitar el descenso. Ni los jugadores de Sergio González ni los de Abelardo querían cometer algún error que les pusiera el partido cuesta arriba nada más comenzar, por lo que los primeros minutos fueron una sucesión de balones largos hacia ninguna parte.
Poco a poco, el Valladolid se hizo con el mando del encuentro, aunque sin inquietar la meta de Diego López. No obstante, el encuentro era muy trabado, con muchas faltas y fricciones, como la acción en la que vio David López su primera tarjeta amarilla. Ocho minutos más tarde, en el 25, el veterano centrocampista realizó una entrada peligrosa y vio su segunda amonestación, dejando así a su equipo con diez hombres.
La expulsión acrecentó la posesión del esférico de los pucelanos, pero los jugadores blanquivioletas no estuvieron acertados en el tercio final. El peligro se concentró en algunos disparos desde fuera del área, mientras la única amenaza del Espanyol era el balón parado.
La segunda mitad también arrancó con un Valladolid dominador, y antes del minuto 50, Enes Unal ya había rematado sobre el marco de Diego López desde dentro del área. Sin embargo, el conjunto local no movía el balón con la suficiente velocidad como para inquietar a un equipo ‘periquito’ muy cómodo en fase defensiva.
Sergio trató de cambiar el guión con la entrada de Sandro Ramirez en el lugar de un centrocampista, Michel. El mensaje caló en el equipo, que empezó a llegar más rápido y con mayor insistencia al área rival. A su vez, el público pucelano, muy numerosa en una extraña tarde calurosa, se volcó aún más con el equipo.
La insistencia tuvo sus frutos en el min 77. Raúl García avanzó hasta la frontal del área, donde conectó un fortísimo chut que Diego López sólo pudo rechazar. El más rápido para recoger el rechace fue Sandro, que embocó el balón a la red y puso por delante al Valladolid.
En la siguiente acción ofensiva, un balón largo a la espalda de la defensa del Espanyol dejó a Enes Unal mano a mano con Diego López. El delantero fue derribado por el portero, pero antes de que pudiera ser señalado penalti, Guardiola empujó el balón a la red y sentenció el partido.
En el 90′ el VAR revisó una posible mano en el área. Absurda, pero existió. No acertó a despejar el defensor le dio el balón en el brazo. Penalti a favor del Espanyol. Engañó Embarba a Masip, disparando a su izquierda. El portero fue al otro lado. Apretó el ESpanyol pero ya se consumia el partido y nada pudo hacer.