El Espanyol ha demostrado, desde la llegada del entrenador Abelardo Fernández, un crecimiento en varios aspectos del juego. También una mayor competitividad, como demostró ayer contra el Atlético de Madrid. Pero los resultados no son suficientes para recortar posiciones hacia la permanencia.
El conjunto blanquiazul sigue colista de LaLiga Santander, a cinco puntos de los puestos de la salvación. El empate contra los rojiblancos, como el que lograron también frente al Sevilla, evidencia la capacidad de los pericos de competir contra los grandes, pero insuficiente para lograr una mayor recompensa en puntos. En el vestuario sé es consciente de que tocará sufrir hasta el final de temporada para cumplir el objetivo.
Cada partido, asume el grupo de Abelardo, es una final. Un encuentro al límite en el que el rival jugará con las urgencias de los blanquiazules para forzar errores y dejarles sin puntos. En cualquier caso, los futbolistas se aferran a las buenas sensaciones que transmite, en ocasiones, su juego. Con el nuevo cuerpo técnico, los catalanes han obtenido más rendimiento en cuanto a puntos y presentan un juego más sólido. Además, han mejorado ante la portería rival.
De todos modos, los errores siguen lastrando al Espanyol. El conjunto blanquiazul es el más goleado de la categoría con 45 dianas encajadas. El déficit que arrastraba el equipo en el primer tramo de la temporada hace más comprensibles estas cifras, aunque la solidez atrás siempre ha sido una asignatura pendiente.
La parcela realizadora también se ha visto mejorada con la llegada en el mercado de invierno del delantero Raúl de Tomás, procedente del Benfica portugués tras el pago de 20 millones de euros. El atacante ya suma cinco dianas. Pero un así el club perico sigue a la cola de los equipos realizadores. Solo Leganés, Celta y Valladolid anotan menos goles que los blanquiazules.
El calendario del Espanyol no permite relajaciones ni lamentos. Osasuna, Alavés y Getafe cierran un mes de marzo que, como todos los que restan, será determinante para fijar las aspiraciones blanquiazules