La temporada del Sporting es evidente está lejos de ser lo ilusionante que se apuntaba en verano. La irregularidad y una categoría como es la Segunda División que si ya de por sí es impredecible este año es directamente indescifrable, han tenido y aún tiene al cuadro gijonés pendiente de la zona baja. La victoria de este pasado domingo frente a la UD Las Palmas ha dado un enorme balón de oxígeno a ese respecto. En octavo puesto y aunque a solo seis puntos del descenso, el que haya 10 equipos entre medias, da cierto margen de seguridad.
Tampoco está siendo una gran temporada de los rojiblancos en cuanto a números. Aunque en goles encajados, con 30, es el tercero menos goleado junto con Zaragoza y con solo Málaga y Cádiz encajando menos, en la faceta anotadora sus números son muy discretos. Lleva anotados 32 goles, un registro que le hace ser el 15º (empatado con el Fuenlabrada) en la clasificación anotadora. Un dato que hace todavía más increíble un hito que este Sporting ha logrado por primera vez en 43 años.
Y es que desde 1977, con Vicente Miera en el banquillo, el cuadro rojiblanco no lograba anotar cuatro goles en un periodo en dos partidos en una temporada. Aquella campaña,que acabó en ascenso a la máxima categoría, el Sporting logró en una victoria en Copa por 5-2 frente al Huesca anotar cuatro goles en el primer tiempo. Quini, Maceda, Morán y Mesa lo hicieron. Pocos días después, en el Ramón de Carranza, el Sporting venció por 1-5 al Cádiz. Un partido en el Ferrero, por partida doble, Morán, Ciriaco y Abel lograron cinco tantos en los segundos cuarenta y cinco minutos del partido.
Esta campaña el Sporting lo hizo por primera vez frente a la UD Almería en la jornada 9. Los goles de Babin, Marc Valiente y un doblete de Aitor García en el primer tiempo allanaron una victoria por 4-2. Algo que se repitió este domingo, aunque en el segundo tiempo, frente a la UD Las Palmas derrotada por 4-0. Álvaro Vázquez, Babin, Murilo y Nacho Méndez fueron los goleadores esta vez.
Aquella campaña 1976/1977 supuso el ascenso a Primera División y el inicio de la época más laureada del club gijonés. En los siguientes años llegarían un subcampeonato de liga, dos finales de Copa y la presencia habitual en competición europea. ¿Podrá repetirse la historia 43 años después? Nunca se sabe.