La temporada de Mickael Malsa (París, 12 de octubre de 1995) en Miranda de Ebro no queda indiferente para prácticamente nadie. El francés, que aunque ya había tenido un paso con más pena que gloria el pasado curso en el Albacete, ha encontrado en el Mirandés -igual que el Mirandés ha encontrado en él- un hábitat donde desplegar sus cualidades. Esas, tras 2.435 minutos disputados en 29 encuentros han atraído las miradas de varios clubes.
Cádiz, antes de que se conociese su sanción de dos ventanas de mercado sin poder fichar, y Mallorca ya habían mostrado en semanas pasadas un notable interés en él. Dada la sanción a los cadistas, los bermellones podrían partir en la pole, sobre todo si se mantienen en la máxima categoría. Malsa, que solo firmó un año con el Mirandés y acaba contrato en junio, buscará si puede dar el salto. Pero ahora tendrá más opciones, o eso parece. Y es que según informa El Desmarque, el francés, aunque internacional con Martinica gusta bastante a Manolo Salvador, director deportivo del Levante.
El club granota es un habitual de fichar año tras año a jugadores de Segunda División. El año pasado lo hizo con Clerc y este año va camino de doblar incluso la apuesta. Con el fichaje de Son casi cerrado ahora Malsa sería una nueva apuesta del ejecutivo granota. Un mediocentro defensivo, con habilidad para construir robar y construir en corto, pero sobre todo un despliegue físico por todo el campo que causa admiración a propios y extraños.