Cuando el pasado mes de octubre Jean-Armel Drolé (Abidján, Costa de Marfil, 18 de agosto de 1997) se fracturaba tibia y peroné en un entrenamiento en una acción desgraciada, todo el mundo se temía que el extremo costamarfileño había puesto punto y final a su etapa en el cuadro grancanario. Pero la paralización de la competición debido a la crisis sanitaria ha hecho que el jugador pueda llegar recuperado al último tramo de competición. Eso sí, siempre que se reanude.
Aunque al jugador le faltará ritmo y seguramente no podrá disponer de muchos minutos, al menos desde el principio, su disponibilidad para Pepe Mel podría ser absoluta. Eso le daría al técnico madrileño un arma más en ataque, ya que el extremo africano ha demostrado que en velocidad tiene un enorme peligro por el costado zurdo, su posición habitual.
Drolè llegó en verano a Gran Canaria cedido por el Antalyaspor turco. Hasta su lesión, había disputado un total 211 minutos en seis encuentros, todos saliendo como suplente. Dio una asistencia en el empate a dos goles frente al Racing de Santander. Entonces, el jugador no contaba con protagonismo para Pepe Mel, algo que es probable se repita tras su vuelta. Pero será una alternativa más para que el técnico pueda elaborar onces y convocatorias.