Todo apuntaba en la dirección de que el día 4 de mayo volvería la actividad a las ciudades deportivas de los equipos. Que las plantillas de LaLiga Santander y LaLiga SmartBank empezarían su actividad de entrenamiento, pero LaLiga ha dicho que por ahora no será así. No lo hará hasta que las autoridades sanitarias les permitan hacer los test de detección del COVID-19 a los jugadores que tanta polémica suscitaron en el pasado.
La patronal quiere aplicar, mientras no le digan lo contrario, su protocolo a rajatabla. Esto es que mientras esos test no se hagan a los futbolistas, éstos no retomarán la actividad de los entrenamientos. Es una condición que LaLiga quiere cumplir; la de iniciar actividad en las instalaciones de los clubes y bajo la tutela de éstos. No obstante si es de esperar que en los propios planes de trabajo de los clubes incluyan que algunos futbolistas salgan a realizar actividad física en la calle.
A pesar de este ligero retraso, en la patronal no ven ningún problema grave este retraso. Solo en el caso de que las autoridades sanitarias demorase la luz verdad a la realización de estos test podría suponer un contratiempo. En este sentido su intención es realizar los test la próxima semana, entre el 4 y el 5 de mayo. De esta forma, dado que necesitarán 48 horas para conocer los resultados, sería a mitad o a finales de semana cuando se iniciarían si todo va según lo esperado. Unas fechas que siguen encajando en el plan de la patronal de reanudar la competición a mediados de junio.