Son ya habituales ruedas de prensa sin medios de comunicación y dirigidas por los clubes. El no permitir declaraciones a otros medios. Pero el ‘Chucky’ Ferreyra, cedido por Benfica y que hasta el parón de las competiciones no contaba mucho por Abelardo, ha concedido una entrevista a la emisora argentina 947 FM Radio.
El delantero aplaude el intento de volver al trabajo: «Tenemos muchas ganas, pero también soy consciente de que hay que ir poco a poco, por las lesiones». Eso sí, Ferrerra ve la forma de hacerlo una locura: «Si te lo pones a leer el protocolo, parece imposible. Si tocas un material, como un balón o una valla, hay que desinfectarlo. O lo de estar concentrados dos meses y salir sólo para entrenar o jugar. Pero trataremos de hacer las cosas bien para que no pase nada. Un solo positivo, lo que es muy fácil ocurra y se acabó».
Tras conocer de primera mano lo mal que su compatriota Vargas pasó con la enfermedad, aunque la acabó superando, el jugador dice que no se siente 100% seguro. Eso sí, no es el coronavirus solo lo que centra las preocupaciones de Ferreyra en la posible vuelta de la competición: «Es una locura. Vamos a jugar en pleno verano, que acá son muy calurosos. Tendremos que ir a Sevilla, y a lo mejor debemos jugar con 40 grados. Va a ser un tema difícil». Un supuesto que no se debería producir, ya que la disputa de partidos por encima de 32 grados no va a ser permitida por la RFEF a través de los equipos arbitrales.
Un derbi que le rememora a Argentina
Por último también fue cuestionado por los derbis frente al FC Barcelona. «Son partidos de una exigencia terrible. Es muy difícil cuando juegas contra futbolistas de esa categoría. Puedes aguantar 20, 25 minutos o media parte, pero en una jugada te desarman. Tienes que jugar al límite y muy concentrado».
Eso sí, dice que lo que más le llamó la atención es el odio perico al FC Barcelona, algo que le recuerda en ciertos aspectos a su país: «Es extraño. El hincha del Barcelona no le tiene odio al del Espanyol. Incluso he visto que le tiene hasta aprecio por decirlo así. Están acostumbrados a jugar contra Madrid, Atlético o Juventus. Pero hablas con uno del Espanyol y odia, no soporta, al Barcelona. Es rivalidad que me recuerda a la Argentina», declaró.