Pocas veces se verá a un jugador hablar tan claro sobre lo que quiere para el futuro como ha hecho Luismi (Puerto Serrano, Cádiz, 5 de mayo de 1992). El centrocampista, cedido por el Real Valladolid en el Real Oviedo, no ha podido ser más franco. Indiscutible en el centro del campo azul prácticamente desde su llegada, para él, «fichar por el Real Oviedo me cambió la vida. La mía y la de mi familia. Pero por completo, eh. Llevaba mucho tiempo en el dique seco, no jugaba y las lesiones estaban ahí. Llego aquí y gracias al club, a los compañeros y a la afición todo da la vuelta. Es un sitio en el que estoy muy cómodo y solo puedo agradecerlo».
En una entrevista a La Voz de Asturias, Luismi incidió más si cabe en ello: «Es que ahora mismo está bastante parado todo. Sé que si sigo en Oviedo estaré feliz, pero lo más importante es la permanencia. Sin ella, no hay nada. A partir de ahí se hablarán las cosas. Pero sí que es verdad que aquí en Oviedo estoy disfrutando mucho y me encuentro muy cómodo». Un claro mensaje a Francesc Arnau, director deportivo carbayón. Pero también a Miguel Ángel Gómez, su homólogo en Pucela.
Porque hacia el Valladolid también envió un mensaje: «No hablé nada con el Valladolid, pero tampoco lo pienso ni me preocupa demasiado. Somos muchos los jugadores que estamos en esta situación, y por el bien de todos se buscará una solución y se llegará a un acuerdo que nos convenga a todos», concluyó el gaditano.