Desde hace semanas se habla con la posibilidad de que Mario Götze (Memmingen, Alemania, 3 de junio de 1992) acabe recalando en el Sevilla. Un club en el que Banega se irá a Arabia Saudí a inundar su cuenta bancaria de petrodólares a cambio de renunciar a aprovechar sus últimos años de auténtico nivel en busca de títulos. Su salida convierte al fichaje de un sustituto en la prioridad número 1 de Monchi.
El de San Fernando lo sabe y maneja una amplia lista. Acertar es clave, porque este año el Sevilla ha mostrado dos caras distintas en juego cuando el argentino ha estado acertado y cuando no. Lopetegui intentó con variaciones tácticas suplir ese flojo nivel o esas ausencias, pero sin un claro éxito. Banega por ahora sigue siendo insustituible.
No se puede negar ni obivar la calidad de Mario Götze. Aunque en plena madurez, ahora mismo con sus 28 años, es cierto que parece ir cuesta abajo. Pero lo cierto es que lo que le ocurre es que el sistema de juego de este Borussia Dortmund no se parece en nada a aquel en el que Götze deslumbró al mundo entero. Si el Sevilla lograse su fichaje no cabe duda sería un puntazo tremendo para Monchi. Máxime teniendo en cuenta la fuerte competencia en Europa que tiene por ese fichaje.
El problema surge en si pensamos en el alemán como sustituto de Banega. Aunque sea un jugador talentoso no es el perfil del argentino. Mario Götze nunca ha sido un jugador sacrificado en labores defensivas, Banega, si bien no ha sido muy exigido en la faceta si lo ha hecho. Defensivamente el Sevilla podría encontrarse con un problema situando a Mario Götze como Banega.
El alemán encajaría mucho más en un rol de campo como el de Franco Vázquez. Por cierto, otro jugador que está más fuera que dentro del club ahora mismo. Ahí Götze sería una gran arma para este Sevilla por su calidad y juego entre líneas e incluso como falso delantero. Monchi y Lopetegui deben darse cuenta por si de verdad se lanzan a seducir a un jugador alemán cuyas ganas de jugar en LaLiga son muy altas.