Valencia Basket 2019/2020: montaña rusa de sensaciones
Después de alzarse como campeón de la 7Days Eurocup 2019, Valencia Basket se enfrentaba al reto de la Euroliga nuevamente. Sin embargo, los fichajes no han tenido un papel destacado y la irregularidad ha sido una constante para los de Jaume Ponsarnau.
La cuarta Eurocup del Valencia Basket llegó acompañada de un brillante título de MVP de las Finales para Will Thomas. La figura del estadounidense fue clave para vencer al Alba de Berlín de Aíto García Reneses. Del mismo modo, su compatriota Matt Thomas mostró un nivel con el que se mereció fichar por los actuales campeones de la NBA, los Toronto Raptors. Y ahí empezó un periodo de fichajes complicado para la dirección deportiva de Chechu Mulero, ya que Will tampoco continuaría y pondría rumbo al Zenit de San Petersburgo.
A todo esto se tendría que añadir los movimientos frustrados de última como el de Sergio Rodríguez que finalmente marcharía al Olimpia Milano junto al legendario Luis Scola. Así pues, llegaron Quino Colom (campeón del Mundobasket 2019), Jordan Loyd (campeón NBA 2019), Vanja Marinkovic, Maurice Ndour y Brock Motum. Sin embargo, ninguna de estas altas ha podido desplazar en relevancia al núcleo fuerte de la campaña anterior.
Liga Endesa: acusando la dureza de competir en Euroliga
En cuanto a la competición doméstica, Valencia Basket tenía como objetivo mejorar el cuarto puesto cosechado en temporada regular y las semifinales perdidas contra el Real Madrid en Play-offs. No obstante, el aumento de exigencia solicitado por una Euroliga tan dura se ha notado en exceso para el club taronja. Una muestra de ello ha sido ese séptimo puesto en temporada regular, eso sí, en tan solo 23 partidos.
Aun así las sensaciones eran bien distintas a temporadas anteriores ya que se percibía una pérdida de solidez sobretodo en el apartado defensivo. A consecuencia de ello se escaparon partidos en los últimos segundos, como el choque como visitante frente al Baxi Manresa de Pedro Martínez. Sin embargo, este encuentro no fue una casualidad ya que hasta en siete partidos, Valencia Basket cae derrotado por una diferencia menor o igual a tan solo cuatro puntos.
Otro ejemplo de la irregularidad mostrada por el equipo valenciano fue que consiguieron el último billete para clasificarse para la Copa del Rey un 12 de enero después de vencer al Divina Seguros Joventut por 100-70.
Fase Final: muy buena imagen a pesar de las lesiones
Desgraciadamente, 2020 pasará a la historia por la pandemia del Covid-19 y sus terribles consecuencias. En lo referente al baloncesto español, se dirá que se salvó la temporada en un gran torneo organizado en las instalaciones de Valencia Basket. Dadas las circunstancias y el poco tiempo de preparación el resultado ha sido más que positivo para la competición y el club propiedad de Juan Roig.
Así pues, el anfitrión ha dado la cara ofreciendo un muy buen nivel en el que se peor enemigo ha sido un año más las lesiones. Antes incluso de reanudarse esta fase final, los taronja perdían a su base de perfil defensivo y organizativo, Guillem Vives (baja tremendamente importante) y al pívot Maurice Ndour. Desafortunadamente para los intereses de Ponsarnau, Alberto Abalde (elegido en el Segundo Mejor Quinteto de la Liga Endesa) caía en combate tras el trascendental choque contra el San Pablo Burgos, perdiéndose así los duelos frente a Herbalife Gran Canaria y la semifinal contra el Saski Baskonia. Sin embargo, la mala suerte se cebaría aún más con los valencianos al perder en el descanso de dicha semifinal a Louis Labeyrie, quién estaba jugando un papel importantísimo defendiendo a Tornike Shengelia.
A pesar de tantas complicaciones, Valencia Basket remó todo lo que pudo en contra de la corriente y aún tuvo el pase a las finales en manos de Jordan Loyd pero su triple en el último segundo no consiguió dar en la diana.
Euroliga: mucho margen de mejora
Del mismo modo que la irregularidad fue una constante en la Liga Endesa, en la Euroliga no fue una excepción. Un exceso uso del triple, una defensa demasiado permisiva y sobre todo, la incapaz para gestionar grandes ventajas, dejaron al Valencia Basket fuera de los puestos de clasificación a la siguiente ronda.
Un duodécimo puesto (cuando se llegó a alcanzar el séptimo escalón) con un balance de 12 victorias y 16 derrotas da cuenta de la exigencia en la que se han visto los taronja. Y es que los inicios no pudieron ser más duros, tanto es así que la primera victoria se diera en la jornada 6 al imponerse al Asvel Villerbanne por 81-72.
Hay que destacar que en esta competición el equipo también mostró muchas dificultades para cerrar los partidos, incluso manejando parciales muy favorables. Varios ejemplos de esta mala gestión fueron las derrotas contra Olimpia Milano, Maccabi Tel-Aviv, FC Barcelona, Olympiacos Piraeus o Estrella Roja en los que se pierde por menos de cuatro puntos y algunos de ellos con canastas sobre la bocina como la de Nikola Mirotic o Lorenzo Brown.
A pesar de ello, no todo fue negativo y se consiguieron victorias muy meritorias como la conseguida en la pista de Fenerbahce en la prórroga, siendo una demostración absoluta de fe y sacrificio colectivo.
Copa del Rey: luces y sombras
Una de las alegrías taronja vino en el torneo del KO. Después de dos ediciones cayendo en primera ronda, los pupilos de Jaume Ponsarnau consiguieron vencer al FC Barcelona. En aquel partido el mejor jugador del Valencia Basket fue Mike Tobey con 16 puntos y una valoración de 22 puntos. Tras una primera parte muy igualada, el parcial del tercer cuarto (14-23) fue demoledor a favor del conjunto valenciano.
Lamentablemente, el haber clasificado como sexto hizo que se cayera en el mismo lado del cuadro que los dos gigantes nacionales y en semifinales esperaría el Real Madrid. El equipo dirigido por Pablo Laso no tuvo piedad y obtuvo una contundente victoria (91-68) para acabar alzando el título frente al anfitrión: Unicaja Málaga.
El jugador más valorado de aquella semifinal sería Facundo Campazzo, quien alcanzó los 31 de valoración y Anthony Randolph sería el máximo anotador con 16.
MVP Taronja 2020: Alberto Abalde
Uno de los máximos exponentes de estas últimas cualidades anteriormente citadas ha sido sin duda, Alberto Abalde. El alero de 24 años ha dado un paso adelante esta temporada y ha demostrado que hay muchas formas de liderar un equipo de baloncesto. Más allá de la capacidad anotadora, el gallego ha destacado por ser un auténtico multiusos. Abalde siempre ha estado disponible para sacrificarse por el colectivo y actuar de base improvisado si así lo demandaba el partido. De igual manera, a su visión para circular el balón no hay que olvidar su rendimiento defensivo, el cual ha sido clave para mantener esta parcela a flote.
No en vano, el alero taronja ha sido reconocido por la Liga Endesa como integrante del Segundo Mejor Quinteto de la competición, siendo el único jugador del equipo que ha alcanzado este estatus esta temporada.
Obviamente, su rendimiento no ha pasado desapercibido tanto para el Real Madrid ni para el FC Barcelona quiénes después de no alzarse con el título nacional querrán hacer un esfuerzo para reforzar sus plantillas. Así pues, habrá que seguir con atención este verano la situación de Alberto Abalde.
Además del número ‘6’ del Valencia Basket si hay que destacar a otro jugador, sobre todo en la Fase Final, ese es el pívot Mike Tobey. El americano también alcanzó un nivel superior en su juego para marcar una influencia y estadísticas más que notables: 14,3 puntos, 10,5 rebotes (máximo reboteador) y segundo jugador con mayor valoración 20,7 (solo superado por Edy Tavares).
Jaume Ponsarnau renovado por una temporada más
Evidentemente las sensaciones tan irregulares del equipo no han dejado indiferente a la afición y su perspectiva sobre el trabajo de Jaume Ponsarnau. Después de alzarse con la cuarta Eurocup, las previsiones eran de dar un pase adelante y asentarse en Euroliga. No obstante, toda la temporada ha demostrado la tremenda dificultad de gestionar las dos máximas competiciones europeas.
A pesar de todos los contratiempos en forma de lesiones y la dureza del calendario, el cuerpo técnico y la plantilla nunca han bajado los brazos. El vestuario taronja se ha mostrado siempre comprometido y han luchado en la pista con un grado excepcional de implicación.
Por todo esto, desde la dirección deportiva del club se ha hecho oficial la continuidad del staff técnico por una campaña más. Será la tercera temporada de Ponsarnau como entrenador jefe del Valencia Basket. Muy destacable fue la Eurocup conseguida el año pasado y la buena imagen del equipo en esta especial Fase Final de la Liga Endesa, en la que se ha quedado como tercero.
La plantilla que se viene
Tan solo una semana después de la finalización oficial de la campaña actual, los despachos del Valencia Basket ya han puesto la maquinaria en marcha. Con el objetivo de mejorar la actuación tanto en Euroliga como en Liga Endesa, los taronja ya han hecho oficiales varios movimientos:
Otro jugador que no continuará será el escolta Jordan Loyd, quien pone rumbo a Belgrado para recalar en las filas del Estrella Roja.
Sin embargo, Klemen Prepelic ya ha sido confirmado para llenar el vacío dejado por el americano. El jugador esloveno se posiciona como uno de los nuevos referentes ofensivos de la plantilla taronja.
A parte de estas confirmaciones hay varios jugadores a la espera de saber su futuro, entre los que se encuentran: Alberto Abalde (a quien se le está relacionado mucho recientemente con el Real Madrid), Aaron Doonerkamp (por quien el Valencia Basket habría planteado el derecho de tanteo), Quino Colom o Maurice Ndour.
Por la otra parte, salvo sorpresas, el núcleo fuerte del vestuario continuará al menos una temporada más: Bojan Dubljevic, Fernando San Emeterio, Sam Van Rossom, Guillem Vives, Joan Sastre, Mike Tobey y Vanja Marinkovic
A la renovación de Jaume Ponsarnau, hay que añadir la continuidad de Louis Labeyrie. El ala-pívot francés ha demostrado ser un jugador de rotación muy válido aportando en muchas facetas del juego. Sin embargo, deberá elevar su eficacia en el apartado ofensivo y tiro exterior.
Tal confianza no ha conseguido alcanzar el australiano, Brock Motum, quien dejará la ciudad de València después de no convencer y no hacer olvidar la figura de Will Thomas.