Una dura prueba para salvarse

LaLiga va llegando a su fin y los equipos empiezan a tener prisa por asegurar su meta. Los sevillistas quieren recuperar su tercera plaza, la cual le fue arrebatada por el Atlético de Madrid, y ahora que están empatados quieren recuperarla definitivamente. En frente tendrán al Mallorca, el cual está recuperando terreno con el Alavés y podría empatar a puntos de ganar esta jornada.

Una pequeña gran revolución

El conjunto de Lopetegui ha demostrado en estas últimas jornadas que sabe reponerse de sus bajones y las tres victorias cosechadas lo atestiguan. El gran momento del equipo va acompañado de un gran estado de forma de Munir, quien ha vuelto del confinamiento con un nivel que recuerda a otras épocas. El hispanomarroquí sigue marcando goles y generando el peligro justo que necesitan los suyos, algo que se traduce en victorias.

La baja de Vaclik finalmente no fue tan sufrida para el Sevilla, quien tendrá que seguir contando con Bono frente al Mallorca. Quien ha sido el portero suplente hasta el momento, consiguió mantener su portería con un solo gol, algo que el mismo Lopetegui ha dejado ver en sus últimas declaraciones. Aunque los elogios, evidentemente, han ido a parar al hombre del momento: «Tiene una buena mentalidad, escucha, quiere crecer y en momentos duros, ha sabido pasarlos siendo positivo. No es fácil cuando no vas convocado o no juegas, pero eso le ha hecho estar preparado para cuando ha sonado el despertador. Nos ha ayudado muchísimo y nos va a seguir ayudando muchísimo«.

El técnico sevillista solo tendrá una baja finalmente, la de su guardameta principal, pero tendrá que tener cuidado si no quiere perder de cara al futuro a dos de sus jugadores. Jesús Navas sigue estando al filo de la navaja con sus cuatro tarjetas amarillas y, ahora, se ha unido a él Éver Banega, quien vio su cuarta amarilla frente al Athletic y que deberá tener cuidado para no dejar cojo a su equipo en las últimas jornadas.

Única misión: dar la campanada

Los hombres de Vicente Moreno, a pesar de las circunstancias, han conseguido ir remando hacia la orilla y ahora se encuentran a tan solo tres puntos de la salvación. La mala racha que está sufriendo el Alavés ha puesto a tiro de piedra el objetivo de salvarse y ahora no quieren dejar pasar la ocasión. Su visita al Ramón Sánchez-Pizjuán no es del agrado de un equipo que sabe del buen momento de su rival, pero que seguirá intentando superarlo.

El técnico bermellón tendrá las dudas de Lumor y Marc Pedraza hasta el último momento, mientras que Pozo podría jugar frente a «su» Sevilla. Su cesión ha sido el soplo de aire fresco que necesitaba el jugador, algo que desde la dirección deportiva sevillista ven con buenos ojos, y la duda sobre si podría jugar o no parece estar resuelta, tal y como asegura el Diario de Mallorca. Vicente Moreno sabe del valor de su jugador y así lo aseguraba en rueda de prensa: «Es un jugador que ha necesitado su tiempo para salir de su hábitat, porque es un chico joven y no es fácil. Pero yo creo que llega ahora en un momento fantástico, incluso puede hacer más, porque es un jugador que tiene mucho margen de mejora«.

Sea como fuere, esté o no esté Pozo sobre el césped del Ramón Sánchez-Pizjuán, el Mallorca sabe que le quedan tres finales frente al Sevilla, Granada y Osasuna, y no puede dejar pasar la ocasión. Golpes sobre la mesa como los vividos frente al Real Madrid o Valencia pueden ser la inspiración para vencer a un conjunto hispalense que puede darle las alas suficientes para conseguir la salvación.