La temporada del Valencia ha dejado que desear a todos los niveles, tanto la plantilla como la directiva no han sabido estar a la altura de un club centenario, que merece mucho más que la pésima imagen que han estado dejando toda la campaña por los campos de España. Pero este desastre viene desde el mes de Julio…
Lío desde la pretemporada
Stage en Suiza, y días antes del primer encuentro, Marcelino, Mateu y Murthy vuelan a Singapur de reunión con el jefe. Algo no marchaba como siempre en la cumbre valencianista. Y pese a que los protagonistas decían que era algo normal, cuando el río suena, agua lleva. Verano muy movido, que si Marcelino iba a ser destituído, entonces Mateu se iba con él; unos querían a Rafinha, otros más minutos de Kang In y Ferran; que si Laguardia, Otamendi, Fekir, vender o no a Rodrigo… Nadie se aclaraba y la brecha era cada vez más elocuente. Hasta que todo voló por los aires.
En la jornada 3, Marcelino era destituído del Valencia CF. Los jugadores no entendían nada, todos estaban con el entrenador y enfrentados con Anil Murthy, con quien la relación estaba cada vez más rota. Horas después de echar a Marcelino, Albert Celades aterrizaba en Manises. Un entrenador sin experiencia ni carácter para un vestuario enfadado.
Hasta que la inercia de Marcelino dio y los jugadores quisieron
Tuvo la suerte el bueno de Albert que los jugadores decidieron darle una oportunidad. Entendían que Celades no tenía la culpa de nada y era Septiembre, muy pronto para dar por perdida una temporada recién empezada. Hasta Diciembre todo fue bien: en Liga el equipo no dejaba malas sensaciones y estaba siempre cerca de los puestos Champions. Mientras, en esta competición la plantilla realizó una gran fase de grupos y consiguió la clasificación como primero de grupo con victorias épicas en Stamford Bridge y el Ámsterdam Arena. Clasificación que dejaba buena imagen y parecía que la destitución de Marcelino y Mateu Alemany no se notaba demasiado. Todavía.
Todo cambió tras la SuperCopa
Tras el viaje a Arabia Saudí con la consiguiente derrota en semifinales frente al Real Madrid, el equipo se vino abajo y no supieron poner freno a la situación. En Liga seguían con opciones de entrar en Champions debido a que ninguno de los equipos que estaban en la terna se decidía por lograr 3 o 4 victorias consecutivas que la sentenciaran. Mientras tanto, en la máxima competición continental de clubes, al Valencia le tocó uno de los (a priori) rivales más asequibles. Bien, pues, además del dichoso Covid-19, los de Celades se volvieron para casa con 4 goles que los dejaban fuera totalmente de la siguiente ronda, dando una imagen espantosa.
Un post-Covid lamentable
«Han llegado como toros», «Espectacular estado físico de los jugadores», «Están motivadísimos y solo tienen la Champions entre ceja y ceja» y otras formas de crear ilusión a los aficionados para el regreso del fútbol tras el confinamiento. Sí es cierto que a los jugadores se les veía fuertes, pero es una pena que al fútbol se juegue con los pies y con la cabeza, y no tanto con los bíceps. Problemas en el vestuario con el entrenador, con la directiva, hasta entre ellos había roces, hasta que la situación se volvió insostenible. Cambiaron de entrenador y pusieron a Voro, que siempre está cuando se le necesita, pero tampoco pudo hacer nada. Cuando los jugadores no quieren, no quieren. Y no querían.
Tenían el escudo de la directiva, sabían que si perdían y daban una imagen como la que estaban dando, todos los dardos iban a apuntar más arriba y ellos se iba a salir de rositas. Y así fue. Además, si a más de la mitad de la plantilla se les dice que no contaban para la temporada que viene, excusa más que suficiente para no esforzarse demasiado. Y así es como se llegó a una 9ª posición tras 38 jornadas de Liga, eliminado en Copa del Rey de penalti en el 93′ frente al Granada en Cuartos de Final y tumbados por la Atalanta en Champions con un global de 8-4.
Los datos
Las estadísticas del Valencia CF está temporada son de equipo de media tabla. Los hombres de Voro han acumulado un total de 14 victorias, 11 empates y 13 derrotas. Los valencianistas han concluido el curso siendo el 4º mejor equipo en la condición de locales, con 40 puntos en su casillero. Solo por detrás de FC Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid. En cambio, lejos de su feudo, el Valencia ha sido el 4º peor visitante, el conjunto che no ha ganado un partido fuera de casa desde 9 de diciembre de 2019, aquel partido acabó 2-4 en el Ciutat de Valencia ante el Levante. Los números efectúan un grave problema lejos de Mestalla, 17 goles a favor, 37 en contra y tan solo 13 puntos. Solo Deportivo Alavés, Real Betis y Real Mallorca han obtenido peores resultados.
El equipo ha cosechado los siguientes números:
– 46 goles a favor.
– 53 goles en contra.
– 34 asistencias.
– 83 tarjetas.
Por lo que respecta a las estadísticas individuales en liga:
-Máximos goleadores: Maxi Gómez 10 goles y Dani Parejo con 8.
-Máximos asistentes: Rodrigo Moreno 7 asistencias y Daniel Wass con 6.
-Pases certeros realizados: Dani Parejo 2242 y Gabriel Paulista con 1756.
-Recuperaciones con éxito: Geoffrey Kondogbia 57 y Gabriel Paulista 48.
-Tarjetas amarillas: Daniel Wass con 7 y Geoffrey Kondogbia con 6.
-Tarjetas rojas: Kangin Lee con 2.
– Minutos jugados: Dani Parejo con 3030 minutos, Gabriel Paulista con 2802 minutos y Daniel
Wass con 2731.
La opinión de los colaboradores
- Gerard Gálvez.- Propietario: Meriton Holdings
«Dicen que solo el hombre tropieza dos veces con la misma piedra. Pues Peter Lim ya lleva 2. Este verano el máximo accionista quiso enchufar la Playstation de nuevo, quería volver a jugar con su juguete. Se avecinaba una temporada horrorosa, y lo sabíamos. Nos hubiera encantado equivocarnos, pero esta situación ya la habíamos vivido años atrás. Así que, como dice el meme de ‘Mucho texto’, yo digo ‘Mucho Meriton’. Cuanto más lejos están, mejor le va al Valencia. Tengo muchas pruebas y ninguna duda.
Mal por la propiedad, principal culpable de esta situación, por reventar un proyecto ganador, con un líder y un hombre detrás que sabía como iba el fútbol de despachos. Por querer imponer una dictadura cada vez más patente, por censurar al que no piensa como él y por creer que la afición es un rebaño que va detrás de ellos sin protestar. Pero mal también por los jugadores, por imponer su venganza personal antes que el bienestar del club que les paga y de la afición que los idolatra. Que los malos están más arriba, pero no nos olvidamos de vosotros.»
- Markos Pous. – Antes teníamos pastor, ahora todos nos falta.
«Imaginaos que el propietario de una granja de ovejas recurre a un capataz y a un pastor porque su propia gestión la está llevando a una situación muy delicada. Digamos, por ejemplo, que estos consiguen poner a la granja como la cuarta mejor de España después de dos años siendo la duodécima y encima consiguen un galardón en la categoría especial (la Copa del Rey). Ahora bien, ¿qué creéis que pasará con las ovejas si echan a su pastor y al capataz para poner a un joven debutante al mando? Pues que las ovejas se descarrían. Marcelino y Mateu fueron quienes hicieron resurgir al Valencia CF con dos clasificaciones para la Champions League, una Semifinal de Europa League y un título once años después. Sin embargo, Meriton Holdings saca pecho por pasar a octavos (donde la Atalanta te fulminó) en un año que quedas fuera de Europa. ¿Y ahora qué queda?: nuevamente una granja abandonada a la suerte de unos gestores sin experiencia y cero autocrítica.»
- Anna Stein
«Detrás de tantas elucubraciones personales y profesionales… el VCF llega a un final de liga indeseado y lastimero. Una raya límite que debe definir quién era y quien quiere ser este club en manos de un gran empresario y pésimo gestor de recursos humanos. Los jugadores han querido participar de la trágica exposición de nuestra descomposición interna. Todos han cogido el guion equivocado, el de enfrente, el del extra … nadie ha sabido desempeñar bien su papel. Nadie. Y mientras hacemos cuentas y cuentos … todo nuestro “sentiment” pende de un pseudo-parqué bursátil e inútil.
Un abrazo…»
- José Antonio Lafuente. – Soñar que no tenemos techo
«26 de mayo de 2019, 00:00 am. Éramos campeones de copa, nos abrazábamos, nos besábamos, reíamos y llorábamos de emoción. Efectivamente soñábamos que no teníamos techo, pero que rápido pasa el tiempo, amigos. No ha llovido tanto desde aquel 25 de mayo, pero parece estar a años luz. Como periodista debo buscar siempre la objetividad, pero permítanme que la aparte un poco de lado en este artículo de opinión para hablarles desde corazón. Uno que a día de hoy está roto y no sabe cuándo se va recuperar del disgusto de temporada que hemos tenido. Estábamos en lo más alto y caímos al infierno, sin quererlo ni beberlo, pero como dice el presidente ¡Es lo que hay!
Pero ¿A quién en su sano juicio se le ocurre despedir a los arquitectos de un gran proyecto a media construcción? Repito ¿A quién? Muchos ahora estaréis pensando ya está aquí otra viuda de Marcelino y de Mateu y sí, lo admito, lo soy. Porque para mí este desastre de temporada se fraguó el mismo día que los cesaron. Con un vestuario roto, un entrenador sin experiencia y con sangre de horchata y por no hablar de la directiva indigna de este centenario club. En la cabeza de alguno le parecía un plan sin fisuras, pero vaya si tenía fisuras… Y como resultado de todo este desastre, acabas noveno y queriendo echar a media plantilla, si es que nos pasa poco. Está temporada la recordaremos siempre, no solo por la pandemia, también lo haremos por el ridículo acontecido.»
- Pedro Pardo.
«No hubo milagro y esta vez no fue por culpa de Voro. El de Alcúdia cogió el timón de un vestuario que dejó de competir tras el empate ante el Levante en Mestalla, tras el parón por la Covid-19. Aquel equipo, dirigido por Albert Celades, dejó de ser el mismo tras el penalti de Diakhaby. Un equipo que meses antes había caído eliminado ante la Atalanta BC en los octavos de final de la Champions League y que también fue apeado en cuartos de la Copa del Rey ante el Granada CF, que finalmente logró clasificarse para la Europa League. Ojalá que el próximo proyecto del Valencia CF sea algo más parecido a lo que ha conseguido Diego Martínez en el conjunto nazarí. «
- Gabri Simón.- De nuevo en la fase 0
«Pasados unos días del final de temporada es menos costoso escribir acerca de la temporada que ha realizado el Valencia C.F. Una temporada en la cual los aficionados nos habíamos ganado el derecho a soñar con que el proyecto Marcelino – Mateu se iba a asentar por tercera campaña seguida. Una temporada en la cual no iba a hacer falta vender jugadores importantes, sino traer jugadores con los que apuntalar el equipo. Nada más lejos de la realidad, la temporada comenzó torcida, Celades fue capaz de reconducir la situación durante un tramo, pero al final el equipo se le cayó y el final todos nos lo conocemos … sin Europa y a comenzar un proyecto serio de nuevo»