Mackay aúpa al Sabadell a las finales del playoff
En un encuentro de infarto, el Sabadell sufrió como nunca para clasificarse a las finales del playoff de ascenso a Segunda División. Mucho mérito tiene Óscar Rubio, que marcó la igualda en la última jugada del partido, forzando la prórroga, e Ian MAckay, que detuvo los dos penaltis decisivos de la tanda cuando su conjunto más lo necesitaba
Esta noche Cultural y Sabadell se han enfrentado en una verdadera guerra característica de los playoff de ascenso a segunda división. Ambos conjuntos son históricos y eran de los equipos que con más probabilidades ascenderían a Segunda División por el denominado «camino largo». Sin embargo, ambos han tenido la mala fortuna de encontrarse en su trayecto hacia la categoría de plata. Es por ello que no es sorprendente que el encuentro estuviera igualado desde el primer minuto.
La Cultural Leonesa comenzó con el mismo planteamiento que tan bien le funcionó contra el Yeclano y con el que consiguió doblegar fácilmente a dicho conjunto. La presión alta era el ingrediente obligatorio para hacer forzar el error del Sabadell. El Sabadell sabía jugar con el balón como muy pocos equipos de estos playoff, así que difícilmente se verían sorprendidos por los leoneses así. Comenzaron las primeras ocasiones para ambos conjuntos, pero ninguna fue demasiada clara ni provocó ningún susto mayor. Eso sí, el conjunto sabadellense, como en el primer partido de playoff, fue el encargado de abrir la lata. Néstor fue el héroe inicial del encuentro, marcando de falta directa sin encontrar ninguna oposición en su disparo. Un gran gol para empezar a calentar el partido. Aún quedaban 77 minutos, pero se le empezaba a complicar la eliminatoria al conjunto leonés muy pronto. A pesar, de lo que se esperaba, tras el gol las sensaciones iniciales fueron de que el Sabadell podía aumentar la distancia, pero pronto se equilibró el partido de nuevo. Tras la pausa de hidratación, la Cultural salió motivada y estuvo a punto de igualar el encuentro en un mano a mano entre Héctor y Mackay en la que el portero coruñés salvó a su equipo. El Sabadell reaccionó poco después con un disparo de Aarón Rey que impactó en la madera defendida por Leandro. A punto estuvo de poner el 0-2 en el marcador Aarón, pero se mantendría el marcador de 0-1 hasta el descanso.
La primera parte había sido frenética, pero dejó la sensación de que el Sabadell estaba más cerca de la final de playoff que el Cultural. Pero daba la sensación de que eso iba a cambiar, pues la Cultural salía con un papel mucho más serio que en la primera parte. A los pocos minutos Gudiño tendría una buena ocasión, la cual no pudo completar, pues tras un control con el pecho no fue capaz de rematar. No era capaz de poner el empate el conjunto culturalista, pero pronto sería capaz de hacerlo, pues Héctor Fernández consiguió tras un centro de Kawaya colocarla perfectamente para poner el empate en el marcador y aguarle el partido al conjunto arlequinado. El Sabadell intentaría volver a mandar en el partido pero no conseguía recuperar la comodidad en el verde. El Cultural se imponía por momentos, pero no dejó de llevarse sustos como uno en el que Aarón centró raso a Heber pero este mandó el esférico fuera en una jugada muy clara. El partido se calentó y comenzaron a desaparecer las jugadas de peligro que estaban caracterizando el encuentro. Tras la pausa de la hidratación no cambió mucho la situación. Ya en los últimos minutos el Cultural, que venía avisando durante toda la segunda parte, puso el 1-2 con un golazo. Tras un centro, Menudo mandó un cañonazo a la escuadra de la portería sabadellana, un disparo ante el que nadie pudo hacer nada, ni siquiera el propio Mackay. Estábamos en el minuto 86 y el Sabadell, sin quererlo ni beberlo, estaba a punto de perder su único ticket para la final del playoff en un partido en el que había empezado dominando. Todo indicaba que el Sabadell se quedaba fuera de la lucha por el ascenso a Segunda División. Pero no todo lo que parece imposible no ocurre, esto es fútbol. El Sabadell intentó ir con todo lo que tuvo, y al final acabó obteniendo el mayor premio posible. Un disparo de volea de un jugador arlequinado iba muy fuerte, pero algo desviado, hacia la portería de Leandro. El portero del conjunto leonés estaba mal colocado y la trayectoria del balón ayudó mucho a Óscar para salvar a los suyos. Remató el jugador sabadellense a las últimas de cambio y consiguió poner el increíble, pero real 2-2 en el marcador, forzando al partido a irse a la prórroga.
El tiempo extra pareció uno propio de Champions League, pues ambos conjuntos demostraron mucha calidad, hubo muchas ocasiones de peligro y ninguno de los dos equipos dejaron de apretar en ningún momento. Parecía mentira que llevaran jugando 90 minutos.
En la primera parte no hubo ninguna ocasión mayúscula, pero sí algunas ocasiones para ambos equipos. El primero sería del conjunto leonés: un disparo en la frontal del área que atraparía Ian Mackay sin complicaciones. La otra ocasión sería un remate de Ozkodi, pero se marcharía desviado el disparo del donostiarra. La primera parte de la prórroga destacaría por la posesión, sin demasiado peligro, de la Cultural Leonesa.
En la segunda mitad de la prórroga destacarían dos ocasiones claras en el que la calidad de los porteros brilló. En el minuto 111, Mackay consiguió rechazar un disparo de Gudiño de cabeza a su palo derecho, mandando el balón a córner. Iván González sería expulsado por una falta por detrás que la delantera arlequinada forzó, pues se quedaba un jugador del Sabadell prácticamente solo ante Leandro en la frontal del área en el minuto 120. Precisamente en esa falta estaría a punto de marcar el conjunto sabadellense: Leandro tuvo que esforzarse para evitar que el disparo muy bien colocado de Lanzarote acabara entrando en la escuadra leonesa. Ruipérez Marín afirmaba que no daba tiempo para más y el partido se decidiría finalmente en la fatídica tanda de penaltis.
La tanda de penaltis destacó por tener muy buenos lanzadores: ambos conjuntos llegaron a los cinco primeros penaltis marcados igualados. Pero había cierta diferencia entre los metas de ambos equipos: mientras Leandro no adivinaba la dirección de los disparos, Mackay se quedaba muy cerca de pararlos, de hecho llegaba a adivinar la dirección de los lanzamientos y a menudo tocaba el balón, pero no conseguía evitar que entraran entre los tres palos. Tanto Óscar Rubio como Alfonso consiguieron marcar los siguientes penaltis y quedaban igualados a seis penaltis marcados. Carlos Beitia debía lanzar el séptimo, pero, sin demasiada decisión, lanzó al palo que se esperaba Leandro y la clasificación de la Cultural dependía de las botas de Martínez y las manoplas de Mackay. El portero del conjunto arlequinado, que había estado muy cerca de parar los últimos penaltis, tenía toda la presión de su equipo bajo sus hombros. Y precisamente aparecieron sus guantes en el momento decisivo, consiguiendo parar el disparo de Martínez y devolviendo a la vida al Sabadell. Seguía con normalidad la tanda de penaltis, volvía a ser el turno del Sabadell de tirar. Ahora si marcaba Boniquet y dejaba todo por decidir, de nuevo, a su compañero Mackay. Benito era el encargado de lanzar el séptimo penalti para la Cultural. Lanzó un disparo fuerte, pero bastante centrado, un disparo que conseguía parar heroicamente Mackay y cuya parada daba la clasificación de infarto para el Sabadell. Saltaba la locura en el conjunto arlequinado rodeando a su salvador portero, mientras que en el cuadro leonés saltaban las lágrimas, ante la imposibilidad de clasificarse al último partido a pesar de haberlo dado todo. El Sabadell, oficialmente, estaba a 90 minutos de ser equipo de Segunda División. Y con su clasificación se confirmaba que los cuatro equipos del Grupo III se enfrentarían entre ellos en las finales del playoff.