Vallori carga contra Mánix: «Yo me quedo aquí, otros tienen que irse»
El ya ex-capitán del Atlético Baleares que cuelga las botas esta temporada, carga con dureza contra Mánix Mandiola quien apunta al banquillo del Racing
Las heridas de la eliminación del Atlético Baleares frente a la UE Cornellà aún no se han cerrado día y medio después de producirse. Confirmada la marcha del club de Mánix Mandiola -quien apunta a asumir el banquillo del Racing de Santander la próxima temporada- las voces críticas por el pobre papel del equipo balearico en el play-off no han tardado en salir y hacer saltar el polvorín que era el club blanquiazul por los aires.
Desde las semanas antes del play-off ya se venía hablando de una situación enrarecida en el club. El técnico vasco no se negaba a atender propuestas de otros clubes cuando debía estar inmerso en el play-off. Pero ya desde antes de que la liga se paralizase allá por marzo en el seno del equipo se hablaba de dos grupos. El hecho de ser campeones de grupo y disponer de hasta dos opciones de ascender, objetivo final del club, calmó un tanto las aguas que, aunque turbias, no se enturbiaron más.
Pero el fiasco en territorio andaluz, cayendo primero frente a Cartagena y Cornellà, dando una pobre imagen en ambos choques, ha hecho explotar todo por los aires y confirmar que en el club había varios bandos. Principalmente dos, los que estaban con Mánix y los que estaban con un club que ya tenía desde hace mucho tiempo pensado prescindir de él. En éste estaba el capitán Guillem Vallori, quien acaba de colgar las botas a los 38 años.
«El objetivo era subir con Vallori o sin Vallori y no hice ningún ruido»
En una entrevista a IB3 Ràdio, Vallori no se ha mordido la lengua sobre Mánix: «El hecho de que un entrenador pase de la noche al día a no contar contigo y a no hablarte, dice mucho de lo que es una persona». Y es que Vallori había sido titular en 25 partidos de los 29 que el club había disputado antes del confinamiento. Pero en el play-off no ha jugado ni un solo minuto. Algo que el jugador esperaba según ha reconocido: «Cuando vi que su trato hacia mí había cambiado me lo esperaba. Yo no he hecho ningún ruido porque por encima está el club y está Ingo y el objetivo era subir con Vallori en el campo o sin Vallori».
Para acabar sus duras críticas al técnico de Eibar dejó un claro mensaje de la razón de su marcha. Incluso le acusa veladamente de ser él quien ha envenenado al grupo y restado las opciones de ascenso: «Creo que ahora se tiene que hacer una buena renovación comenzando por el banquillo y el Baleares acertará. […] Yo me quedo en la isla, seré un balearico más, animaré, y otros tendrán que irse de la isla».