Las entradas en el Valencia están bastante paradas ahora mismo. Con excepción de la defensa, donde sí parece que el club está acelerando para intentar fichar rápido y la oficialización de Yangel Herrera -solo pendiente del pasaporte de Gabriel Paulista- el resto de demarcaciones sigue parado. Algo que hace que el tiempo se le eche encima al club ché, pero es que la operación salida bloquea las entradas.
Una de las demarcaciones que sufre eso es la delantera, donde no hay movimientos y eso impide que pueda realizar movimientos y se quede en simples sondeos. Uno de los últimos a los que el Valencia ha ‘tirado la caña’ es al atacante del Mónaco, Keita Baldé (Arbúcles, Girona, 8 de marzo de 1995). El hispano-senegalés de 25 años se desenvuelve por todo el frente del ataque y podría reforzar la delantera ché una vez se puedan agilizar salidas. Especialmente las de Cheryshev y de Gameiro, que el club quiere sacar por sus altas fichas.
Según informa MARCA, el Valencia se habría encontrado con una buena predisposición tanto de Keita Baldé como del Mónaco para negociar. El jugador tiene contrato hasta 2022 y ha sufrido una notoria devaluación desde que los monegascos pagasen 30 millones a la Lazio en 2017. Pero eso no impedirá que, en caso de traspaso, el Mónaco pida una cantidad bastante alta. De ahí que la probable fórmula que más pueda agradar sería una cesión en una negociación que se presume larga.
Keita Baldé se formó en las categorías inferiores del FC Damm, Cornellà y FC Barcelona. Con 16 años dejó el Barça y se fue a la Lazio, donde empezó a despuntar. Ha sido internacional con Senegal en 24 ocasiones y esta última campaña ha jugado 28 partidos, logrando 8 goles y dando 5 asistencias.