La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha puesto en conocimiento de las federaciones territoriales, los clubes, futbolistas, entrenadores y árbitros el protocolo reforzado para la vuelta a las competiciones oficiales de ámbito estatal y carácter no profesional de la presente temporada. Esto afecta a Segunda División ‘B’, Tercera División y División de Honor juvenil.
Junto al protocolo, que ha sido validado por el Consejo Superior de Deportes, la RFEF ha preparado una «plataforma digital». Será a través de la misma, mediante la web, donde todos y cada uno de los clubes, futbolistas, etc. podrá enviar la documentación necesaria. Así como las declaraciones responsables de cada uno de ellos, que tienen carácter obligatorio para competir.
El objetivo es establecer unas bases de tipo sanitario y operativo mínimas y comunes para todas las competiciones de fútbol y fútbol sala. Todo ello sujeto y subsidiario a las normativas del Gobierno, las comunidades autónomas y, puntualmente, las autoridades locales.
El protocolo y sus reglas básicas están sustentados en el principio de «autorresponsabilidad». Son cada uno de los clubes, sus dirigentes, sus responsables, jugadores, técnicos, auxiliares, delegados, árbitros y otros miembros de las estructuras de la federación quienes, con su actuación personal y responsable, garantizarán la salud propia; la de sus familias y la de las demás personas que comparten la afición por la práctica del deporte federado.
Así, se considera una obligación esencial de todos la comunicación inmediata y precoz al responsable del club como primer elemento; tras estos a la RFEF o la Federación territorial según el caso. En caso de cualquier indicio de posibles síntomas sospechosos de la infección de la COVID-19, la adopción de medidas de aislamiento inmediato y la no presencia individual en entrenamientos o competiciones cuando se tenga sospecha de estar infectado; o se haya estado en contacto con alguna persona de la que hubiera sospechas de estar infectada.
Para velar por el cumplimiento de este protocolo y garantizar que se aplique correctamente. Los clubes deberán nombrar un Delegado de Cumplimiento del Protocolo (DCP), que debe ser alguien con el suficiente prestigio y autoridad dentro del club para garantizar que todos los integrantes cumplan con las obligaciones establecidas en todas las competiciones. Tanto en entrenamientos como durante los partidos.
El DCP de un equipo deberá comunicar obligatoriamente al árbitro del encuentro, antes, durante o después del mismo cualquier incidencia de incumplimiento de los protocolos. De esta forma el árbitro tendrá constancia fehaciente de dicha denuncia en el acta del encuentro.
No se podrá iniciar el partido si el árbitro no tiene constancia, al menos, de que se ha tomado la temperatura a todos los miembros de los equipos. Además debe haber comprobado que el club ha cumplimentado las obligaciones comunicativas previstas; así como que todos los jugadores han cumplimentado la declaración responsable.
En caso de que se detecte un positivo el procedimiento a actuar es claro. Si un equipo detecta en entrenamientos o en mitad de una competición un positivo, el protocolo determina que todos los clubes y los miembros individuales de los mismos están obligados a comunicarlo. Las entidades son la consejería de Sanidad, el ayuntamiento correspondiente y a la propia RFEF.
Automáticamente hay que seguir el protocolo del Ministerio de Sanidad y/o autoridad sanitaria autonómica. Esto incluye el desinfectar las instalaciones e iniciar el rastreo de otros posibles casos positivos.
Específicamente respecto a la presencia de público, la RFEF entiende que debe ser cada club que actúe como anfitrión el que regule este extremo. Siempre en función de la normativa sanitaria dictada en el territorio y de su propia capacidad de cumplimiento de las exigencias de todo tipo (número máximo, protocolos específicos, autorizaciones, etc) que la normativa pública autonómica le fije.
En cuanto a los medios de comunicación, se aplicarán con carácter prioritario las normas que hubieran dictado al respecto las autoridades autonómicas y/o locales y no las contenidas en este documento. Entre las que figuran que la prensa se situará en la grada y nunca a pie de campo o pista. Las ruedas de prensa previas y posteriores al partido pueden celebrarse mediante un sistema de videoconferencia/en remoto. Así como las entrevistas a jugadores y técnicos se realizarán en todo caso fuera de las instalaciones deportivas y de manera individualizada.