Buenas sensaciones sin goles entre España y Portugal
El equipo de Luis Enrique deja un buen sabor de boca, con una presión y un estilo ofensivo basado en la búsqueda continua de ocasiones. De momento, el gol se le resiste a los delanteros de la Roja.
Final sin goles en el José de Alvalade entre Portugal y España en un partido con una parte para cada combinado. Lo positivo: la vuelta a la presión alta y la voracidad con y sin balón. La parte negativa, la falta de efectividad y la pérdida de ritmo en los segundos cuarenta y cinco minutos.
La primera parte tuvo claro dominio español. La primera oportunidad para los de Luis Enrique llegó en el minuto 3 cuando Gerard Moreno se adentró en el área tras una buena combinación de Olmo y Canales. Rui Patricio estuvo atento y tapó todos los huecos posibles.
La presión en tres cuartos de La Roja (hoy de blanco) estaba siendo asfixiante para los lusos. El tridente delantero español estaba haciendo un trabajo táctico muy importante, provocando las continuas pérdidas de balón de los locales.
De los tres arietes, el más destacado en esta primera mitad fue Dani Olmo, muy activo en su parcela. Rodrigo Moreno, hoy más desplazado a la banda derecha intentó probar a Rui Patricio, pero el balón fue muy centrado. Acto seguido fue Gerard Moreno el que disparó a puerta tras recoger un rechace en el área, pero se encontró de nuevo con el meta portugués.
Poco a poco, el equipo de Costa Santos fue encontrando su lugar en el campo. A esto se le sumó alguna que otra imprecisión de Reguilón, que llegó en un par de acciones pasado de revoluciones, pudiéndole haber costado más de una cartulina amarilla. Finalmente la vio en el minuto 44. Los primeros 45 minutos acabaron con una ocasión portuguesa. Guerreiro envió muy alto una volea dentro del área.
Los primeros compases de la segunda mitad fueron para los locales. La selección española salió con una marcha menos, sin esa presión tan alta que había destacado en los primeros minutos de partido. Luis Enrique dio entrada a Gayá, Mikel Merino y el debutante del Levante UD, José Campaña.
En el minuto 53, Cristiano, muy austente hasta el momento, hizo acto de presencia con un zapatazo que impactó con gran violencia en el larguero de Kepa, que no hubiera podido hacer nada si el balón hubiese ido entre palos.
El ritmo de partido disminuyó considerablemente frente a la primera mitad. En el minuto 62 Luis Enrique hizo debutar con el combinado nacional a otro jugador, Adama Traoré. El jugador de los Wolves pudo por fin vestir la elástica española en un partido después de varias convocatorias sin poder disputar minutos por diversas circunstancias.
Portugal, con menos ocasiones, lograba llevar más peligro a la portería de Kepa. Esta vez fue Renato Sanches el que se topó con el travesaño tras un buen remate de primeras del jugador luso. La pelota botó en la línea y se marchó fuera de la portería española.
La entrada de Adama Traoré fue una auténtica bendición para el equipo español. Cada vez que tocaba el balón se internaba con gran potencia y buscaba el pase atrás o el lanzamiento a puerta. La primera fue para un balón a Dani Olmo al punto de penalti, en la segunda se la jugó él, pero su disparo se fue por muy poco de la cepa del palo largo de Rui Patricio.
Kepa, que había participado poco, tuvo que emplearse a fondo para blocar el disparo de Trincao, que fue habilitado por un Joao Felix que entró en el minuto 73 sustituyendo a CR7. El choque terminó con largas posesiones españolas y un última ocasión portuguesa en un saque de esquina, donde Joao Felix no empujó una pelota que se encontraba a un metro escaso de la línea de gol.
Buenas sensaciones, aunque aún queda una asignatura pendiente para la selección: el gol, que se le está resistiendo a los delanteros españoles. El próximo sábado 10 de octubre, España se medirá a Suiza en Valdebebas, en partido de Liga de Naciones y el martes 13, en Kiev, misma competición, contra Ucrania.