La UD Las Palmas dejó los deberes para última hora, pero en la noche del cierre de mercado el equipo amarillo realizó hasta 7 movimientos para confeccionar la plantilla que pedía Pepe Mel. Las bajas de última hora de Mantovani, Srnic y Raúl Fernández dejaron espacio para que la UD pudiera inscribir a Pietro Iemello –cuya cesión se hizo oficial el domingo – a Cristián Cedrés y al jugador del filial Ismael Athuman.
En portería no habrá novedades, la UD mantendrá a Álvaro Valles, que pasa a tener dorsal del primer equipo, a diferencia del año pasado. La segunda opción será Ale Domínguez, aunque este tendrá ficha del filial.
Para apuntalar la defensa llegaron Tomás Cardona, cedido desde Godoy Cruz, Ale Díez, que se incorporó a la disciplina amarilla tras terminar su vinculación con el Extremadura y Jonathan Silva cedido por el Almería. Pero sin duda, la mayor de las sorpresas fue la incorporación de Ismael Athuman al primer equipo. Tras la salida de Mantovani, Pepe Mel deseaba contar con un defensa central más en la plantilla y el jugador del filial e internacional por Kenia ha convencido al técnico madrileño y se ha hecho con un puesto entre los profesionales.
Como refuerzos en el centro del campo llegaron en propiedad Óscar Clemente y Enzo Loiodice provenientes de Atlético de Madrid y del Dijon respectivamente. También llegó cedido a la isla por Charlotte FC Sergio Ruiz que estará hasta diciembre de 2021. Finalmente, para ocupar las bandas llegaron Robert, cedido por el Betis, y Pejiño que llegó libre procedente del Sevilla.
El delantero que reclamaba Pepe Mel llegó esta misma semana proveniente de Italia. Pietro Iemello se convirtió en jugador de la UD tras el acuerdo al que llegaron los canarios y el Benevento para que el punta italiano se quede cedido hasta final de temporada.
Además de todas estas nuevas incorporaciones, volvieron al club tras cesión Edu Espiau, Sergio Araujo, Maikel Mesa y Christian Rivera. Jugadores con los Pepe Mel cuenta para esta temporada. En total, 14 incorporaciones si contamos con estos jugadores que vuelven tras cesión.
13 bajas en total
En cuanto a las bajas, la UD Las Palmas ya conocía la marcha de Pedri, Josep, Narváez, Galarreta y Fede Varela. Además, desde el inicio de mercado se les puso el cartel de transferibles a De la Bella – que salió cedido al Cartagena – y a Mantovani y Srnic, los cuales rescindieron su vinculación con el club en las últimas horas de este mercado.
Otras bajas fueron las de Deivid -que rescindió contrato al inicio del mercado- o Cristian López, al que la UD decidió no renovar. En el caso de Rubén Castro fue el delantero el que decidió no renovar, pese a la insistencia del club, mientras que Mauricio Lemos fue traspasado al Fenebache.
En total, 13 son los jugadores que por uno u otro motivo no continúan en la disciplina amarilla.
Los puntos negros de la UD
Con todos los movimientos que ha hecho durante el mercado, el conjunto amarillo ha conseguido no sólo liberar masa salarial del club, sino también crear una plantilla joven y equilibrada. Atrás quedan años donde los fichajes se hacían para tapar agujeros y sin un proyecto o idea en mente. La actual dirección deportiva ha demostrado en este mercado que existe una hoja de ruta por la que la UD transitará durante los próximos años.
La sensación en la isla es de que en los despachos se ha llevado a cabo un buen trabajo, al menos sobre el papel, pues el terreno de juego será el que decida si la confección de la plantilla es la adecuada. Pero también es cierto que, en algunos casos concretos, la forma de actuar que ha tenido la UD no ha sido la deseada por los aficionados.
El caso más llamativo es el de Tana. El jugador, que ha sido noticia en los últimos años por temas extradeportivos y fue despedido del club gracias a una cláusula en su contrato y a la polémica investigación de varios detectives privados.
Otro caso llamativo es el de Cristian Cedrés. El jugador canario, que volvió hace 2 temporadas tras pasar por la cantera de Real Madrid y Villareal no fue inscrito en La Liga ya que en el primer partido de la temporada no estaba disponible por una lesión y por tanto se dio prioridad a otros jugadores. Debido al exceso de fichas que existía en la primera plantilla – no se encontraba salida a Mantovani, Srnic, Raúl Fernández ni a Christian Rivera – el joven jugador no fue inscrito hasta la ultima hora de mercado, cuando el central argentino y el extremo serbio rescindieron contrato. Lo mismo ocurrió con Ismael Athuman, que no fue inscrito hasta minutos antes de que cerrara el mercado.
Por último, se encuentra el caso de Raúl Fernández y Christian Rivera. El portero, que lleva lesionado más de 1 año, no entraba en los planes amarillos y se le buscaba una salida ya que su salario es muy elevado. El centrocampista, por su parte, no quiere estar en la isla, pero tampoco encontró equipo durante este mercado y Pepe Mel no contaba con él. La solución que encontró la UD y que comunicó el club una vez cerrado el mercado fue la de trasladar a estos dos jugadores al ERTE en el que está inmerso la entidad. Una decisión que sólo duró unas horas ya que en la tarde del martes el club amarillo comunicaba que finalmente ambos jugadores no entraban en el ERTE. Christian Rivera pasaba a ser un activo de la primera plantilla ya que estaba inscrito en La Liga y por lo tanto podrá jugar si así lo considera Mel. Mientras, el meta vasco no tendrá dorsal ya que por su lesión no estará apto para jugar al menos hasta enero de 2021.
Una plantilla para soñar
A pesar de todos los problemas y extrañezas que ha tenido este mercado, no sólo para la UD, sino para todos los equipos de La Liga, la plantilla que ha confeccionado Las Palmas, unida a un entrenador conocedor de la categoría y que ha demostrado sacar el mejor rendimiento de sus jugadores invita a que la afición amarilla pueda soñar.
El equipo ha demostrado signos de buen juego en las primeras 4 jornadas de liga y una vez cerrados los despachos, serán los terrenos de juegos quienes decidan si la UD ha acertado o no con la planificación de esta temporada.