Aunque en estos tiempos de pandemia sanitaria, el factor campo no es lo determinante que estamos acostumbrados a que sea, el hecho de jugar en casa siempre es un plus. O al menos, debería serlo. EL curso pasado eso le falló de forma estrepitosa al RCD Espanyol. En el tétrico y penoso descenso sufrido, el cuadro perico solo logró dos triunfos en su feudo. Once meses de temporada en los que venció 1-0 al RCD Mallorca -al que se da la circunstancia de que no ha logrado vencer este año- y 2-0 al Deportivo Alavés.
Una marca, nada difícil de igualar o superar por otra parte, que ya ha alcanzado esta campaña. En tres encuentros como local, el equipo de Vicente Moreno ya ha logrado esas dos victorias con el 3-0 que le endosó en la jornada inaugural al Albacete y la victoria por la mínima frente al Alcorcón del pasado sábado. El otro encuentro, como se comentaba anteriormente, fue contra el Mallorca que acabó como empezó; sin goles.
El siguiente hito a alcanzar es el de los puntos logrados como local. La temporada pasada sumó un total de doce y esta temporada ya lleva siete. Eso tendrá la oportunidad de hacerlo a lo largo de lo que resta de este mes de octubre. CD Mirandés y SD Ponferradina visitarán en las jornadas séptima y novena respectivamente. Si el Espanyol vence ambos encuentros superará esa marca. Una marca que el curso pasado le llevó once meses lograr y que ahora podría lograr en apenas mes y medio.