El Bayern termina rematando en el final a un digno Salzburgo
Los bávaros logran sacar adelante (2-6) un partido muy duro y frenético ante un campeón austriaco que le compitió cara a cara, pero que tras el cuarto gol recibido se vino abajo ante la maquinaria alemana.
No la paso nada bien el Bayern Münich, pero está a nada de alcanzar los octavos de final de la UEFA Champions League. Sufrió ante un Salzburgo muy valiente y enérgico, que le llevó al límite en todo momento. No obstante, el talentoso cuadro austriaco acabó siendo superado (2-6) por la jerarquía y la pegada del actual rey de Europa, que por partidos así resulta ser más difícil de batir.
El Salzburgo demuestra su potencial
Estaba advertido el Bayern de lo que se iba a encontrar en Salzburgo. Aunque pareciera que sus enfrentamientos anuales ante el Leipzig en la Bundesliga servirían para vaticinar lo que se venía, el escenario planteado fue notoriamente distinto. Los ‘toros’ austriacos no tardaron mucho en dar una probada a los teutones de la «original» ‘formula RB‘. Así fue como, antes de los cinco minutos, Berisha inauguró el marcador al fusilar a Neuer (4′) dentro del área. Un golpe que dejó atónito por un momento a los de Hansi Flick, que volvieron a presentar sus credenciales igualando la intensidad de su rival. Sin embargo, esto solo llevó a que el choque se encandilara más; una delicia para el espectador neutral.
El partido entró en una batalla futbolística incesante en el mediocampo, que conllevó a momentos para cada uno y eso a muchas respuestas de ambos. Así, luego de que un testarazo meteórico de Ramalho lo despejara Neuer, el Bayern consiguió el buscado empate. Lo logró Müller al avivarse ante Mwepu y ser derribado dentro del área. Penalti (el segundo de la noche: el VAR anuló el primero sobre Hernández). Lewandowski, un especialista, no falló (21′) y tras eso, su equipo se fue a por todas por el segundo gol. El polaco y Coman casi lo logran, pero fueron bloqueados en sus remates. Fue ya casi llegando al descanso que una internada de Müller en el área llevó a que Kristensen introdujera el balón en su propia meta.
Boateng pone las tablas a favor del campeón
La respuesta tras vestidores de los locales no tardó en llegar. Ulmer mandó un centro a la zona de penalti, pero Koita, referencia ofensiva debido a la baja de Daka, encontró la respuesta de Neuer. El accionar del actual monarca de Austria llevó a que el partido nuevamente haya entrado en un ida y vuelta. El Bayern estuvo cerca de ampliar su marcador, mas Coman y Gnabry, erráticos todo el duelo, fallaron sus disparos. Eso lo aprovechó el Salzburgo, algo más recluido, para apretar en busca de aprovechar los errores de su oponente, algo que lograron pasando la hora de juego. Ramalho anticipó el balón a Lewandowski y, con las líneas bávaras separadas, filtró el esférico al recién ingresado Okugawa para que este iguale nuevamente el encuentro (66′.)
Parecía que iba a ser el primer revés del campeón alemán en este 2020, ya que no se veían finos de cara a puerta. No obstante, cuando Boateng devolvió la ventaja a los muniqueses (79′), la maquinaria bávara se reactivó y finiquitó el partido con tres zarpazos en el final. Sané, calcando a Robben, marcó un golazo inatajable para Stankovic (88′). Poco después, Javi Martínez puso un centro medido a la cabeza de Lewandowski, que el polaco resolvió con un excelente gesto técnico (88′). El marcador fue redondeado por Hernández al aprovechar un balón mal bloqueado por Ramalho para fusilar a portería (90+1′). Toda una demostración de pegada al final que terminó sentenciando a un digno Salzburgo, que fue atropellado en el final por el Bayern, ya a un paso de la siguiente ronda.
