Una nueva operación para reducir los plazos
Con la nueva operación realizada en su rodilla, Kiko Olivas espera que se pueda acortar en un mes su vuelta a los terrenos de juego
El jugador del Real Valladolid Kiko Olivas, lesionado de larga duración desde el final de la pasada temporada, ha vuelto a pasar por el quirófano. Esta vez se ha sido sometido este lunes a una artroscopia en la rodilla izquierda. Una nueva intervención quirúrgica con el fin de liberar adherencias y acelerar su proceso de recuperación.
Bajo la dirección del doctor José María Lomo, jefe de los servicios médicos del Real Valladolid, la intervención se ha desarrollado satisfactoriamente en un hospital de la capital vallisoletana. Está previsto que el jugador, operado el pasado 31 de julio de la temida triada (rotura del ligamento cruzado anterior, lesión en el menisco externo, esguince de grado I en el ligamento colateral lateral y un edema óseo en el cóndilo femoral externo) comience el trabajo sobre el césped en las próximas semanas. El plazo de recuperación de esta artroscopia será de unas 6 a 8 semanas.
Una vez transcurran, si todo ha evolucionado positivamente, podrá volver a entrenar en un terreno de juego en la segunda quincena de enero. Es el paso previo para, una vez que coja la forma, pueda tener ya minutos de corto a finales de febrero o principios de marzo. De cumplirse esa previsión se ganaría prácticamente un mes sobre la previsión inicial; aquella que hablaba de un periodo de baja de entre 8 y 9 meses.