El portero de la Unión Deportiva Logroñés, Dani Giménez, ha afirmado este viernes que está satisfecho con su debut. Todo ello a pesar de encajar dos goles del uruguayo del Girona, Cristhian Stuani y que supuso su derrota. Considera que su experiencia le ayudó a incorporarse a un nuevo club y jugar con solo un entrenamiento.
De hecho, la situación atípica del portero gallego ha llevado a que haya sido presentado de forma oficial este viernes, tras jugar ya ayer en Girona, donde su equipo perdió por 2-0; Giménez es el quinto portero que actúa en el Logroñés esta temporada, ya que siguen de baja los tres primeros de la plantilla (Rubén Miño, Roberto Santamaría y Yari Meykher) y solo está disponible otro, el suplente del filial, Pradas.
Giménez, de 37 años, ha admitido que el fichar por el Logroñés un miércoles y debutar el jueves hizo que al principio se sintiera «como un juvenil» sobre todo porque estaba sin equipo «y cuando las cosas salen mal pierdes la ilusión y uno necesita estos arrones que da la vida para reengancharse a todo esto”.
Cree que la situación del equipo es “muy buena”, pese a haber perdido cuatro partidos seguidos, el último en Girona «ante un rival que tiene pólvora arriba, lo que marca un diferencial con cualquiera. El equipo no debe centrarse en la derrota sino en lo que hizo mal, como el que cuando encajó el primer gol, se desorganizó por querer empatar el partido demasiado rápido”, ha señalado y ha recalcado que «en cualquier caso, hay otros equipos que pagarían por estar en la situación en la clasificación en la que está el Logroñés”.
Sobre su estado físico y de forma, Giménez ha señalado que ha estado entrenando cinco días a la semana durante el tiempo que ha estado sin equipo y en ese sentido, se ha mostrado muy satisfecho con el trabajo realizado porque ha podido estar capacitado para vivir una situación como esta”. Por otro lado, el director deportivo del club riojano, Carlos Lasheras ha afirmado que nunca se ha encontrado con una situación de este tipo en la portería en ninguno de los equipos en los que ha estado.
“Sabemos de la importancia de cada partido y teníamos que pasar bastantes semanas con solo un portero, por lo que pensamos en fichar a un guardameta capacitado para jugar ese mismo día, física y personalmente”, ha afirmado.
Este fichaje ha provocado que la UD Logroñés cuente en estos momentos con el máximo de fichas posibles cubiertas aunque “en enero no se cierra nada porque puede que algún jugador quiera salir y que el club quiera hacer algún movimiento”, ha señalado. En ese sentido, ha reclamado que la Liga debería aumentar el número de fichas por club a 30 o habilitar más tiempo entre partido y partido “para evitar que surjan lesiones”, ha concluido.