La SD Eibar despide el 2020 sin ninguna pena

Este fatídico 2020 está a punto de finalizar. Toca echar la vista atrás y hacer balance de cómo le ha ido el año a la Sociedad Deportiva Eibar. A grandes rasgos por lo vivido en los últimos meses se podría decir que cualquier tiempo pasado fue mejor. Será un año recordado por la pandemia de la COVID-19, el confinamiento, la ausencia de público en las gradas de Ipurua y la salida del club de varios de los jugadores insignia de las últimas campañas. Lo positivo se resume en la continuidad de los armeros en LaLiga Santander y el constante crecimiento desde la cordura de una entidad que continúa ganándose la admiración del mundo del futbol y que como al resto del planeta no le da ninguna pena dar carpetazo a un año difícil de encajar.

Cumpliendo en Liga y batacazo en Copa

El Eibar ha disputado 36 partidos ligueros en este 2020 con un balance de nueve victorias, doce empates y quince derrotas. Los armeros han marcado 33 goles y encajado 42, sumando un total de 39 puntos. Cabe destacar el pobre balance obtenido en Ipurua donde tan solo se han logrado ganar cuatro partidos en todo el año. Obteniendo los peores números en este sentido desde que aterrizaron en la Primera división.

El otrora inexpugnable feudo armero al cual le realizaron un lavado de cara espectacular en el verano de 2019 ha echado mucho en falta a su gente. A raíz del confinamiento y la prohibición del público en los estadios los de José Luis Mendilibar han notado su ausencia pegando un bajón considerable en los guarismos obtenidos como locales.

Con todo el Eibar ha logrado pasear sin demasiados contratiempos por ese alambre sin red que es la zona de descenso, evitando salvo en momentos puntuales las posiciones que condenan a la perdida de categoría.

Han mejorado sus registros a domicilio respecto a temporadas anteriores y logrando conquistar campos en los que se les había negado el pan y la sal años atrás. Como ejemplo la victoria lograda en el Sánchez Pizjuán o el punto recientemente obtenido en el Camp Nou, estadio donde siempre había salido derrotado.

Sin embargo la eliminación a principios de año del torneo del K.O en dieciseisavos frente a un Badajoz dos categorías inferior dejó un regusto amargo en el seno armero porque se esperaba llegar más lejos. El año se salda con tres encuentros de Copa del Rey frente a Cacereño, Badajoz en la pasada edición y ante Racing Rioja en la presente y se resume en dos victorias y una derrota.

Si hablamos de resultados y rachas, la mayor goleada y la mayor derrota del año vinieron de la mano. La derrota más sonrojante la sufrieron en la jornada 25 de la temporada pasada cuando cayeron por cinco goles a cero frente al Barcelona en el Camp Nou y a renglón seguido en la fecha 26 consiguieron su victoria más solvente al imponerse en Ipurua al Levante por tres goles a cero.

En cuanto a rachas han sido cinco el máximo de jornadas consecutivas que han aguantado los armeros sin conocer la derrota y en el plano negativo casualmente cinco también en las que se mantuvieron sin saborear las mieles del triunfo.

En el apartado individual destaca Marko Dmitrovic como el futbolista con más minutos disputados de la plantilla en este 2020. El meta serbio ha sido un fijo y sus actuaciones bajo los palos muy aplaudidas, hasta el punto que son varios los equipos que se han interesado de cara a la próxima temporada por sus servicios. Su contrato finaliza en verano de 2021 y dentro de pocos días podría estar en disposición de decidir su futuro.

En el apartado realizador el ariete conquense Kike García con siete dianas se lleva el galardón del máximo goleador de los armeros en el 2020. Es de ley también hacer mención a los guarismos del mister. Mendilibar ya ha sobrepasado los doscientos partidos en Primera con el Eibar y sus números de encuentros, victorias y logros,  ponen el listón muy alto a los próximos inquilinos del banquillo de Ipurua

Despedidas ilustres y pasos al frente

Con el cambio de temporada el Eibar dijo adiós a varios de los jugadores que habían sido el pilar fundamental de los proyectos de los últimos años. El argentino Gonzalo Escalante abandonó la entidad rumbo a Italia dejando el legado de su compromiso y rendimiento y siendo el extranjero con más partidos en la historia del Club.

El capitán Iván Ramis también tuvo que despedirse de Ipurua, torturado por las lesiones, el balear prácticamente con la temporada en blanco cerro su ciclo con los azulgranas. Otra nombres destacados de la últimas campañas que buscaron nuevos horizontes fueron Fabián Orellana, Charles Dias y Pablo De Blasis.

La marcha de estos jugadores ha provocado que sean otros los futbolistas que asuman el rol de importantes en el equipo. Junto al mencionado Dmitrovic, segundos espadas como Esteban Burgos, Edu Expósito, Bryan Gil o Kike García  han dado un paso al frente y están llevando el peso de los armeros y las críticas más favorables. Sin olvidarnos del japonés Take Inui que ha ido de menos a más finalizando el año en un gran momento de forma.

Recomposición de la plantilla

Con la continuidad de la categoría en el zurrón tras un final de campeonato en el que los armeros salvaron los muebles gracias a victorias a domicilio como las obtenidas ante el Granada o Espanyol, tocaba encarar la 20/21  mirando hacia un futuro que no se presentaba nada halagüeño por la situación económica que atravesaba la entidad y por las dudas sobre la continuidad al mando del equipo del buque insignia del club José Luis Mendilibar.

Fran Garagarza y Amaia Gorostiza lograron convencer al míster de Zaldibar para seguir una temporada más. El primer paso y más importante ya estaba dado y ahora tocaba recomponer un plantilla a base de cesiones. El margen de error en la elección era mínimo y se apuraron los plazos hasta última hora para conformar un equipo que pudiera ser competitivo en la máxima categoría.

Finalmente se incorporaron cinco cedidos, Yoshinori Muto, José Recio, Kevin Rodrigues, Alejandro Pozo, Bryan Gil y se fichó al polaco Damian Kadzior. Junto a los jóvenes procedentes del filial Miguel Angel Atienza, Unai Arietaleanizbeaskoa, Sergio Cubero, Unai Dufur o Eñaut Mendia, José Luis Mendilibar ha ido  completando las convocatorias.

En él debe de los armeros en estas primeras dieciséis jornadas ligueras de la 2020/21 hay varios apartados. El primero y fundamental la fuga de puntos que se está dando en un Ipurua en el que aún no han ganado y para más inri varios de ellos frente a rivales directos por la permanecía. La ausencia de gol también preocupa siendo junto al Cádiz el equipo que menos goles ha podido festejar hasta la fecha.

En el haber podemos destacar que se han mantenido como un equipo competitivo y valiente en la mayoría de los encuentros disputados y que han mejorado sus prestaciones de manera ostensible en sus partidos como foráneos.

En un curso marcado por los cinco cambios que han provocado un mayor reparto de minutos, los estadios vacíos que han restado emoción y sentimiento a los encuentros, a los goles, a las victorias y a las celebraciones. Y por las numerosas lesiones que se han dado jornada tras jornada producto de lo comprimido del calendario. Del VAR mejor no hablamos.

En definitiva la SD Eibar, se mantiene entre los grandes, a pesar de las numerosas dificultades que le ha puesto en el camino este 2020. El año no ha sido para tirar cohetes, pero lograron en julio el objetivo prioritario disfrutando de su séptima campaña consecutiva en LaLiga Santander. Para este 2021 que ya tenemos a las puertas, el deseo será el mismo, mantener la categoría y escribir otro capítulo con final feliz en la etapa más gloriosa de la entidad armera. Ezina Eginez.