Un Osasuna con diez planta cara a un impreciso Alavés

El CA Osasuna hizo una demostración de su poderío defensivo y consiguió sacar un empate de su duelo contra el Deportivo Alavés en un partido correspondiente a la decimosexta jornada de LaLiga Santander. A pesar de quedarse con diez en los primeros compases del encuentro, la defensa rojilla se convirtió en un muro impenetrable que el ‘Glorioso’ tan solo pudo perforar desde el punto de penalti.

Osasuna necesitaba una alegría antes de terminar el año. El conjunto navarro lleva sin reencontrarse con la victoria desde el 24 de octubre, cuando se impuso al Athletic Club por 1 a 0 en El Sadar. Dos meses de debacle que lo han llevado hasta el penúltimo puesto. Sin embargo, los de Jagoba Arraste no querían dejarse llevar por la presión. Los primeros minutos fueron de tanteo, con balones largos, imprecisiones y despejes como protagonistas. Osasuna quería controlar el esférico y, de repente, dio el primer susto del partido. Calleri, cayendo a banda, superó a Laguardia por la línea de fondo, dejó el balón hacia atrás para Budimir y el delantero disparó al palo. El colegiado había anulado la jugada por fuera de juego del argentino, pero ya era un primer aviso muy claro.

Osasuna se queda con diez en una imprecisa mitad

Lejos de conseguir un respiro, los sueños de Osasuna se vieron quebrados en cuestión de segundos. Deyverson perseguía un balón largo liderando el contraataque del Alavés y Rubén, cortando de raíz el peligro, lo derribó en la frontal de área con una dura entrada que le hizo ver la tarjeta roja directa. Jagoba Arrasate reclamaba un fuera de juego, pero el VAR decretó que Juan Cruz había habilitado el delantero. Por segundo encuentro consecutivo en casa, Osasuna se quedaba con inferioridad numérica en los primeros compases. Budimir fue el hombre sacrificado para dar entrada a Sergio Herrera.

El Deportivo Alavés tomó posesión del esférico, pero le costaba horrores llegar a la portería rojilla. La defensa navarra estaba bien colocada y tanto Aridane como David García se encargaban de tapar los espacios que el otro dejaba y, sobre todo, de despejar los centros que llegaban buscando testas albiazules. Precisamente, fue Aridane el ejecutor de una de las escasas ocasiones de la primera mitad, rematando demasiado alto un córner. Un minuto más tarde, Rubén García probó fortuna con un disparo raso desde fuera del área que Pacheco atrapó sin problemas. Era el primer disparo a puerta de todo el partido.

Segundos antes de llegar al final del tiempo reglamentario, el Alavés acarició el gol con la punta de los dedos. Joselu remató demasiado desviado un córner lanzado por Rubén Duarte en el palo corto. Osasuna no quería quedarse atrás. Moncayola, tras superar a tres adversarios, intentó aprovechar que Pacheco estaba adelantado para sorprenderle con un globo muy lejano al que le faltó precisión. Rubén García cerró la primera parte con una falta directa que se estrelló en el palo. Osasuna, a pesar de jugar con diez, tenía hambre de victoria.

Ráfagas, dos goles y un empate meritorio

Ambos equipos salieron de los vestuarios dispuestos a inaugurar el marcador. Lucas Pérez había sustituido a Deyverson y rápidamente se convertiría en el principal baluarte de la ofensiva del ‘Glorioso’, mientras que un Jon Moncayola cada vez más seguro era el ancla del centro del campo rojillo y el conductor de todos los ataques. Aunque los disparos seguían siendo escasos, el partido cogió un ritmo más vertical y dinámico, centrándose la mayoría de acechos en las bandas. Luis Rioja ansiaba más protagonismo.

Igual que una película de acción, una intrépida batalla precede al clímax de la obra. Recuperación de Osasuna en defensa, combinación con los centrocampistas, tres toques, contraataque, se supera el medio del campo, pase largo para Enric Gallego en la banda derecha, hacia atrás para Roberto Torres y ¡Boom! Gol. El balón había pasado por debajo del cuerpo de Fernando Pacheco. Con diez, Osasuna acababa de marcar el 1 a 0.

Cinco minutos más tarde, Aridane despejó un balón en el punto de penalti. Oier intentó alejar el peligro, pero al ir a golpear el balón, le propinó una dura entrada a Joselu. Estaba justo encima de la línea que da acceso al área. Tarjeta amarilla y pena máxima favorable al Alavés. Unos segunos más tarde, con toda la calma del mundo, Lucas Pérez ejecutó la sentencia disparando al centro. De nuevo, la igualdad reinaba en el luminoso. Jota Peleteiro, quien acababa de entrar en el terreno de juego, intentó ahondar en la herida con la jugada posterior.

El partido volvió a coger sentido de urgencia. Sergio Herrera y Pacheco tuvieron que estar más atentos que nunca. En el minuto 88, Osasuna estuvo a punto de escuchar los cantos de sirena de la victoria, pero el cabezazo de David García, superando en el juego aéreo a Tomás Tavares, salió lamiendo el larguero. Se acababa de perdonar el 2 a 1. En los últimos acordes del partido, Lucas Pérez no pudo llegar al preciso pase de Borja Sainz cuando el guardameta rojillo ya había quedado batido y no pudo rascar dos puntos adicionales de su visita a El Sadar.

Finalmente, el partido acabó con un empate a 1. En un encuentro trabado, las ocasiones llegaron a ráfagas por ambos lados. Osasuna se coloca en decimonovena posición, con 13 puntos. Por su parte, el Alavés se irá a dormir decimotercero, con 18 puntos.