El Cornellá se carga al Atlético
El equipo catalán se "llevó" el Roscón en el Día de Reyes y da la campanada de la ronda tras eliminar a los de Simeone, que caen ante un Segunda 'B' por segundo año consecutivo
Lo del Atlético y el partido único es ya un caso de estudio. Como pasó el año pasado, el equipo de Simeone ha vuelto a ser eliminado por un equipo de Segunda División ‘B’. En este caso, el Cornellá de Cataluña. Ni sacando un once más titular que el año pasado ha evitado que se vuelva a repetir la historia.
Ser un equipo de Primera División, y más siendo líder de la Liga y estando en octavos de Champions te obliga a dar una imagen que el Atlético no dio en, al menos, setenta minutos. Joao Félix no fue el jugador que estábamos acostumbrados a ver, la defensa no estuvo fina y el centro del campo, sin ideas. Pases imprecisos, fueras de juegos contantes y, pese a que el Simeone fue a por todas, el Atlético, otra vez, no pudo ganar a un Segunda B.
Sí que es verdad que el partido fue un asedio del equipo de Simeone, pero que, pese a que se mostró un equipo de lo más ofensivo, se puso muy pronto por detrás en el marcador y no fue capaz no solo de darle la vuelta, sino de marcar, al menos, un tanto. Nada más empezar, un gran remate de Adrián Jiménez se colaba en la portería defendida por San Román, que cuajó un partido seguro pese al gol recibido, y se transformaba en el primer gol del partido, favorable al equipo catalán. Jarro de agua fría que se consumía cuando, dos minutos más tarde, Giménez tuvo que abandonar el terreno de juego. Enésima lesión del jugador uruguayo, que acumula una lesión tras otra y todas ellas en su mejor estado de forma.
Por lo demás, lo esperado. El Cornellá aprovechó su ventaja en el marcador para encerrarse atrás y esperar a salir al contraataque, que pese a eso, pudo haberse ido al descanso con más ventaja. El Atlético no era capaz de encontrar espacios y no disparó a portería en todo el partido. Lo más cercano, un disparo de Saúl que dio en el larguero a los veinte minutos.
Para más inri, Ricard Sánchez, que repetía titularidad en Copa, pecó de inocencia y fue expulsado a falta de media hora para el final. El Atlético acabó el partido con Saponjic (que jugó su tercer partido -y no completo- en el año y medio que lleva en la entidad rojiblanca) y Soriano, que, incluso siendo del filial, cuajó mejores minutos que muchos de los titulares.
Por ende, se puede decir que la eliminación fue merecida, ya que, a partido único, no solo puede pasar que te eliminen, sino que, si no peleas y sigues la línea de «partido a partido», no tienes nada que hacer por mucho que el rival esté en una categoría inferior.
Pero no todo es demérito para el Atlético, sino también hay que darle mérito al Cornellá, ya que al fútbol juegan dos y, la mayoría de las veces, el hecho de que un equipo juegue mal es por culpa de que el otro no le deja jugar. Y fue el caso, el Cornellá presionó durante los noventa minutos y no dejó ni un solo instante sentirse cómodo a los de Simeone. Borja García, Pablo Fernández, David Sánchez o, por supuesto, el goleador Adrián Jiménez fueron los mejores de su equipo y no tuvieron errores reseñables y, por ellos y por todos los jugadores del conjunto entrenado por Guillermo Fernández, se merecieron el pase a los dieciseisavos de final y dar la campanada de esta segunda ronda de Copa del Rey.