Macheda podría ser el ‘9’ de Rufete

Según apunta el diario Sportime en Grecia, el Espanyol ha fijado sus miras de forma clara en el fichaje de Federico Macheda (Roma, Italia, 22 de agosto de 1991). El delantero italiano, que varios años atrás apuntaba a ser una de las futuras estrellas del balompié cuando jugaba en el Manchester United, está actualmente en el Panathinaikos griego. Rufete estaría muy interesado en que fuese la cuadratura del círculo para cerrar la plantilla perica hasta verano. Sería una operación que en términos económicos encajaría en el presupuesto disponible de los pericos.

Las cifras en las que se están hablando serían de que el Espanyol lo incorporaría cedido con opción de compra. Pagaría 100.000€ al club heleno, asumiría 300.000€ de su ficha y en caso de ascenso lo ficharía en propiedad; quedando vinculado Macheda al cuadro espanyolista hasta 2023 con una ficha de unos 800.000 euros anuales. Sin embargo esa obligación de adquirirlo en propiedad en caso de ascenso es lo que está bloqueando la situación. Panathinaikos quiere que así sea y el Espanyol que esa obligatoriedad sea en base a otros criterios.

Con menos ya de 48 horas de mercado abierto, la de Macheda parece ser la única opción de que pueda llegar un delantero al Espanyol. Si no es el italiano, lo normal es que el Espanyol se queda como está. En el caso de que se desbloquease, Macheda llegaría ocupando la ficha de un Víctor Campuzano que saldría del equipo con dirección al Sporting, donde ya tiene un acuerdo para jugar allí por tres temporadas.

Macheda se dio a conocer con 17 años en el Manchester United. Entonces su aparición en unos pocos partidos revolucionó al club de los ‘red devils’. Se llegó a hablar de que, por su fútbol y condiciones, podía ser de los dominadores de la década pasada. Pero no fue así, pues se fue desinflando con los años. Dejó el Manchester United para pasar al Sampdoria, Stuttgart, Queens Park Rangers, Doncaster, Cardiff City, Novara y desde 2018, Panathinaikos.

En Grecia ha marcado 30 goles y 10 asistencias en 86 partidos, asentándose como un delantero de área y menos móvil que antaño. Un rematador puro que cuando ha tenido continuidad ha tenido buenos registros anotadores. Sin embargo esta campaña su protagonismo ha decaído y sus números también. De ahí que el club ateniense no se cierre a su salida y esté dispuesto a negociar. Debido al escaso plazo disponible, no tardará en haber una resolución.