La SD Eibar en el segundo mes de 2021 podría dar un paso de gigante en su objetivo por lograr la permanencia en LaLiga Santander. Disputará cuatro encuentros frente cuatro rivales directos por salvar la categoría. Un póker de finales en el horizonte que podrían dar un respiro a los de José Luis Mendilibar en la cruenta pelea por escapar de la zona de peligro o por el contrario meterles en muchos problemas si no logran los resultados deseados.
Con poco margen de error
El conjunto de Ipurua afronta este tramo clave de la temporada con los puestos de descenso en los talones. A pesar de que son varios los equipos implicados en la tarea, con el paso de la jornada están viendo como algunos inquilinos de los puestos bajos han ido escalando peldaños dejando a un grupo de seis equipos un poco más descolgados.
Tras la fuga de la zona de peligro del RC Celta, el Levante UD o el Athletic Club. Vistos los últimos resultados que se han dado, parece que también Valencia y Getafe van metiendo tierra de por medio respecto a las posiciones comprometidas.
En definitiva tras 21 jornadas disputadas, se puede intuir que la pugna por salvar la categoría va a ser cosa de seis o siete equipos. Entre los que se encuentra el conjunto armero con veinte unidades y tan solo un punto de renta sobre la zona roja. En las próximas fechas el Eibar se verá las caras contra cuatros de esos equipos que conforman actualmente el vagón de cola. Un mes para contener la respiración, sacar la mejor versión y cruzar los dedos para que las lesiones no condicionen demasiado.
Mal momento para entrar en una crisis de resultados
Para iniciar su particular tournée por la zona pantanosa, viajarán el próximo domingo al Sadar para enfrentarse a Osasuna. Siete días más tarde recibirán en Ipurua al Real Valladolid en lo que será un partido a vida o muerte.
A renglón seguido el Martínez Valero será testigo de otro duelo de los denominados cruciales. Enfrente tendrán un rival directo como es el Elche que tiene dos encuentros menos disputados pero su dinámica no es buena y podrían dejarle muy tocado en el fondo de la clasificación. Y sin sacarse el cuchillo de entre los dientes, ni tiempo para lamentaciones para cerrar el mes de febrero recibirán al reanimado SD Huesca en casa, en otro de los partidos que deben de ganarse sí o sí.
Echando la vista atrás
La incógnita será que Eibar veremos, porque el conjunto armero esta temporada vienen cambiando sus registros habituales de campañas anteriores. En Ipurua les cuesta ganar y contra los rivales que les acompañan en la clasificación también. En cambio frente a los equipos de la zona alta han firmado buenas actuaciones y a domicilio están sacando más puntos y réditos que nunca a su presión alta.
Cabe recordar que frente a los cuatro equipos que van a enfrentarse en este fatídico mes, los guipuzcoanos en la primera vuelta sumaron cinco puntos, fruto de la victoria lograda por uno a dos en el José Zorrilla y de sendos empates ante Osasuna y Huesca. El Elche les sorprendió en su feudo ganándoles por cero a uno.
En definitiva cuatro auténticas finales por la permanencia, donde el goal average también tendrá su importancia. Oportunidad de oro para los armeros de dar un paso de gigante en la consecución del objetivo prioritario y de ganarse un margen de error que actualmente no tienen. Seguramente marzo se afrontará de otra manera si se suman al menos seis puntos de los doce que hay en juego. En caso de que no sea así, lo que les viene a continuación es para echarse a temblar.
Imágenes: @SDEibar