A día de hoy es imposible negar que, tras la llegada de Juan Carlos Garrido, el CD Castellón es otro. Suma un triunfo y una derrota desde su llegada al banquillo blanquinegro y afirmó ante el primero de los dos encuentros que el equipo va a disputar de forma consecutiva en Castalia que, «este equipo lo va a todo; va a dejarse la vida en el campo para ganar los tres puntos» ante el Mirandés. Y añadió que el único objetivo es ganar y que para ello el trabajo que se ve en los entrenamientos se debe transformar en buenos resultados.
Lo cierto es que, por ahora, esa promesa lo está cumpliendo. A pesar de la derrota en Almería, donde el equipo encajó tres goles, esa fragilidad defensiva que mostraba el Castellón parece haberse esfumado. De hecho los números defensivos cantan que el partido a ese nivel fue mejor frente al cuadro andaluz que el que se venció al Sporting, donde Álvaro Campos fue el verdadero salvador con cinco paradas, un penalti incluido. El sacrificio defensivo del equipo en el campo que promete lograr, no hay forma de decirle que no lo esté haciendo.
Un partido de mucho ritmo
En cuanto al rival del domingo, Garrido indicó que el Mirandés se encuentra en un buen estado de forma, que les obligará a competir al máximo a nivel ofensivo y defensivo. «Será un encuentro de mucho ritmo ante un oponente bueno y con jugadores jóvenes y atrevidos». También valoró las incorporaciones de Javi Moyano y Yann Bodiger en el mercado de invierno. «Son jugadores con experiencia, conocen la exigencia que hay esta temporada y tienen un buen nivel. Nos pueden ayudar mucho», concluyó.