Plácida victoria del Barça
Los culés lograron imponerse de forma clara a los albiazules no sin antes llevarse un susto.
Fútbol Club Barcelona y Deportivo Alavés disputaron en la vigésima tercera jornada de Liga un encuentro que se desarrolló prácticamente según lo previsto dada la clasificación.
Los primeros minutos del partido expusieron claramente el guion de ambos conjuntos: Ronald Koeman y los suyos monopolizaron la posesión del balón mientras buscaban aperturas del entramado defensivo de Abelardo, quien parece que ha vuelto a Álava logrando calar sus ideas en los jugadores. A pesar de tener las líneas muy juntas y esperar a la contra, el Barça consiguió hacerles daño con una jugada que culminó con remate desde (casi) el punto de penalti de Antoine Griezmann rechazado en el último suspiro por Martín Aguirregabiria.
Los vascos ajustaron las deficiencias de su planteamiento inicial para desesperar a los catalanes alrededor de 25 minutos porque no llegaban al área de Pacheco (nivelazo el suyo), aunque el abuso culé de las jugadas por el centro tenía mucho que ver. Tener, por ejemplo, en banda izquierda sólo a Junior Firpo y en la derecha a Francisco Trincao (poco dado al desborde por fuera) puede ser el motivo… Hasta que Óscar Mingueza incidió para colocar un gran centro que el debutante Ilaix Moriba controla y deja atrás para que Trincao fusilara la portería contraria. Parece que arranca el portugués, que ha dejado otra buena actuación con doblete incluido.
Tras ver que le anulaban un gol por fuera de juego de Griezmann, Messi se encargó de compensarlo al borde del descanso con un disparo ajustadísimo al palo desde fuera del área. La 1ª parte finaliza con 2-0 en el marcador.
Sergio Busquets se quedó en el banquillo, obviamente para descansar de cara al PSG, por Samuel Umtiti (preocupante su panorama) y Frenkie de Jong volvió al pivote. Pasaban los minutos de forma estéril hasta que un error de Ilaix propició el 2-1 de los blanquiazules. El joven pecó de confianza y terminó llevándose las manos a la cabeza, afectado por dar vida a su rival. Además, se quedó con las ganas de resarcirse marcando un gol pero no recibió el pase de la muerte esperado de Francisco Trincao, quien se quedó sólo contra el portero tras una dejada magistral de Griezmann. Sin embargo, tuvo un buen debut.
El Barcelona se activó para no complicarse la vida y la entrada de Pedri cambió la cara del equipo, impactando de forma inmediata en el encuentro con un pase al hueco que dejó a Messi en un mano a mano contra Pacheco de cuyo rechace emanó el 3-1 de Trincao.
Los de Koeman, en cuestión de pocos minutos, sentenciaron el encuentro con 2 goles más: uno a la escuadra de Leo Messi y otro de Junior a puerta vacía. El partido no tuvo más historia porque los vitorianos bajaron los brazos y los barcelonistas rotaron y se gustaron. Hubo otro gol anulado a Trincao, muy activo hoy y por ello muy nombrado en esta crónica.
Con el pitido final, ambos conjuntos se dieron la mano y cada uno a lo suyo: Unos a buscar la salvación, otros a sacar adelante una temporada que desde el comienzo se antojó complicada y cuya próxima parada es la ida de los octavos de final de la Champions League contra el finalista de la pasada edición: Paris Saint-Germain.