Contundencia, fuerza, inteligencia táctica, salida de balón, conducción potente e imperial en el juego aéreo. Estas cualidades son las que definen al dorsal 21 del RCD Mallorca. Antonio Raíllo se está erigiendo como el mejor central del equipo y de la categoría gracias a sus actuaciones semana a semana.
La última máster class la impartió ante el Espanyol, en la que dejó seco a Raúl de Tomás que se peleó con el cordobés y salió perdiendo en todas las acciones en las que se encontró con Raíllo. Estuvo especialmente atento al jugador del Madrid y éste no tuvo ni un momento de respiro y vivió la impotencia de sentirse arrollado por el central rival.
El único momento en el que el 21 no estuvo en el césped, la jugada acabó en una falta cercana al área por culpa de su ausencia que acabó en el gol visitante. Raíllo no se limitó a sus tareas defensivas, sino que fue el primer eslabón en la cadena generadora de fútbol, en cada acción, el futbolista bermellón era el que daba salida de balón al portero y el nexo de unión en cada jugada. De hecho, hubo una jugada, en la que exhibió su potencia en conducción que acabó en fuera de juego de Antonio Sánchez, pero en la que Raíllo demostró su calidad en salida de balón.
Este nivel lo ha ido demostrando jornada tras jornada, siendo clave en cada uno de los partidos que ha disputado el Mallorca hasta el momento. Ante el Espanyol el equipo no pudo sumar, pero él volvió a acumular una exhibición desde el centro de la zaga que le confirma como uno de los cinco mejores jugadores de la categoría y el mejor central de la misma.
Una pareja única
El Mallorca tiene un tesoro en su zaga y junto a él, encontramos a Martin Valjent, que no se queda atrás en cuanto a nivel demostrado. En tres años formando zaga con el cordobés ha cometido muy pocos errores. La edad del eslovaco le hace un jugador con mucho potencial, pero Raíllo ya es una realidad consagrada en la categoría. Juntos están formando una pareja de un nivel espectacular en la categoría de plata.