Dallas sigue escalando en el Oeste
Los Dallas Mavericks se impusieron a los Memphis Grizzlies en un partido cómodo que les permite colocarse a un puesto de Playoffs.
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Había que remontarse ocho días para encontrar el último partido que jugaron los Mavericks. Aquel lejano domingo 14 de enero cayeron en un partido apretado frente a los Blazers a pesar de la exhibición de Luka Doncic (44 puntos). A partir de ese momento, y como consecuencia de las fuertes tormentas de nieve que han azotado Texas toda esta semana, los Mavericks se encontraron con unas vacaciones inesperadas.
Era un buen momento para que el quinteto titular entrenase compartiendo pista, algo que ha sido prácticamente imposible desde el inicio de la temporada. Sin embargo, los frutos de este trabajo tendrán que esperar para hacerse evidente, pues pocas horas antes del partido contra los Grizzlies se anunciaba que la presencia Porzingis en el mismo era cuestionable como consecuencia de una rigidez en la parte baja de la espalda. En efecto, lo vio desde el banquillo.
Por su parte, los Grizzlies llegaban después de haber jugado un back-to-back el fin de semana que habían saldado con una victoria y una derrota, en consonancia con su balance total de la temporada (13 partidos ganados y 13 partidos perdidos). Un balance que les permitía ocupar la novena posición del oeste, si bien para mantenerla era necesario que ganaran en el American Airlines Center.
En resumen, el partido enfrentaba a dos rivales directos en la parte media de la Conferencia Oeste, donde en estos momentos 8 equipos se encuentran comprimidos en 4 partidos y medio de diferencia.
Se notó desde el inicio que los Mavericks no querían sustos. En los primeros minutos ya abrieron un parcial considerable, dejando a los Grizzlies en apenas 5 puntos, y yéndose ellos a 15 merced a los 11 puntos de un Josh Richardson en estado de gracia. Memphis tuvo problemas muy serios en ataque durante todo el cuarto, siendo incapaces de anotar ni desde dentro -Valanciunas no tuvo el día- ni desde fuera. De hecho, solo Tyus Jones fue capaz de sumar para su equipo, con 8 puntos que dejaron el marcador en un preocupante 26-13 al final del primer cuarto.
El segundo cuarto discurrió por el mismo camino. Los Grizzlies seguían sin fluidez en ataque y los Mavericks conseguían encontrar a sus tiradores abiertos. Y correr. De hecho, los puntos al contrataque dejaron un dato demoledor al final del partido: 24 para los locales, 2 tan solo para los visitantes. Conviene destacar en este momento el papel de Brunson, que deja cada vez que juega la sensación de que tiene potencial para ser base titular en la mejor liga del mundo. Estando así supone un alivio necesario para Luka Doncic, que no necesita ahora ser el ball handler en todos los ataques.
Y de hecho ayer fue un partido curioso en ese sentido. Luka metió sus primeros puntos cuando llevaba sobre la pista 10 minutos, y al descanso apenas se fue con 7. Si bien esta no es la producción normal del esloveno, ni la aconsejable para ganar partidos importantes (en especial su 2-9 en tiros libres), sí resulta positivo que el equipo de Carlisle vaya encontrando nuevas posibilidades en ataque más allá de su all-star. Hay que sumar para la causa a los ya citados Richardson y Brunson, pero también a Tim Hardaway Jr., que ha aceptado y está brillando en su puesto en la rotación como sexto hombre. Y por supuesto a Porzingis. Empieza a ser imperioso que el letón consiga aguantar algunos meses sin lesiones de ningún tipo.
Volviendo al partido, bueno, realmente no hubo demasiado partido después del descanso. Los 18 puntos de ventaja nunca estuvieron en peligro a lo largo del tercer cuarto, si bien este periodo vio lo más parecido a un interesante duelo entre las respectivas estrellas, Ja Morant y Luka Doncic. Morant acabó con 22 puntos y 9 asistencias, pero no tuvo ayer el respaldo de sus compañeros necesario para intentar la remontada.
Porque no hubo remontada. Lo que sí hubo en el último periodo fue un maquillaje del resultado que a la vez permitió a jugadores como Clarke, Valanciunas o Bane alcanzar los dobles dígitos en anotación. Fue lllamativo que Carlisle no aprovechara estos minutos para dar entrada a los menos habituales de la rotación. Quizás fue porque, estando los cuatro rookies todavía en la burbuja de la G-League, no había incentivos para ello. Sea como fuere, cuando se consumió el tiempo, el marcador indicaba un 102-92 que no era sino un motivo para el engaño, porque sobre la pista la diferencia fue bastante mayor.
Sea como fuere, nueva victoria de los Mavericks, que acabaron el mes de enero con un preocupante récord de 8-13, pero que ya solo están a una victoria de alcanzar el 50% y, de paso, la octava posición en el Oeste. De momento arrebatan la novena a los Grizzlies.
El próximo partido será esta misma noche contra unos Celtics sumidos en las dudas, mientras que Memphis tendrá dos noches de descanso antes de recibir a los Clippers en el FedEx Forum.
@NBAdiccion