El director general del Sevilla, José María Cruz, dijo tiempo atrás que este próximo verano seguramente el club haría una gran venta. Un peaje necesario para seguir potenciando el equipo y hacerle un sitio perenne (o casi) entre los ‘grandes’ de Europa. Los nombres de Koundé y En-Nesyri están muy trillados ya con muchos interesados en ellos, especialmente en la Premier. El inglés es un mercado que puede ayudar al Sevilla a colmar esas expectativas recaudatorias para reinvertir en la plantilla.
Pero no solo en la Premier puede encontrar el Sevilla un comprador para esa gran venta planeada. Porque según Calciomercato, el Milan quiere echar su red sobre la amplia y talentosa plantilla sevillista en la que no todos tienen sitio. Dos nombres, jóvenes y con futuro, gustan especialmente en el cuadro de San Siro: Bryan Gil y Óscar Rodríguez.
El extremo cedido en el Eibar es, ahora mismo, el que centra los grandes esfuerzos del Sevilla por blindarle. Las negociaciones para una extensión de contrato hasta 2025 y una cláusula de 150 millones, claramente prohibitiva para casi cualquier club, están en marcha. Pero actualmente su cláusula es de 35 millones. Una cifra que los lombardos podrían ejecutar si logran alcanzar un acuerdo contractual con el extremo de Barbate. Se antoja difícil, pues Bryan Gil ha antepuesto el Sevilla a cualquier otro club ahora mismo. Pero desde el Milan aguardan.
En el caso de Óscar Rodríguez el club rossonero podría tener una mejor receptividad por el jugador. El talaverano es ya una de las ‘decepciones’ sevillistas este año. Tras abonar casi 15 millones de euros por él, apenas ha disputado 674 minutos en 19 encuentros. Un bagaje muy pobre para un jugador que ya debutado incluso con la Selección Española y que si su estatus no cambia es de esperar valore una salida.
El Milan ya intentó ficharle el pasado curso, pero entonces el jugador priorizó quedarse en España y fichar por un club Champions. Si el cuadro de San Siro finaliza la actual temporada en buena posición y regresa al máximo torneo continental el próximo curso, quizá Óscar Rodríguez acepte cambiar LaLiga por una Serie A que va, poco a poco, recuperando parte del estatus y popularidad entre las grandes ligas europeas.