Las puertas del FC Barcelona para José Luis Gayá apuntan a estar selladas este verano. Aunque se lleva tiempo hablando de un fuerte interés del club culé en el capitán ché y de unas conversaciones, que adelantó Superdeporte, entre emisarios de Lim y de miembros del club, las opciones de que el de Pedreguer acabe en la banda zurda del Nou Camp son muy próximas a cero.
Ninguno de los tres candidatos (Toni Freixa, Joan Laporta o Víctor Font) tiene entre sus prioridades el fichaje de un lateral zurdo. Aunque no todos los candidatos han hablado de fichajes, más con la delicada situación económica del club por la crisis del COVID-19, ni siquiera los que -como Freixa- han anunciado varios fichajes de campanillas a bombo y platillo, tiene en mente y cartera a Gayá.
La intención del Valencia, al menos de forma oficial, sigue siendo la de blindar a su capitán. Pero desde dentro del club ya se han deslizado planes si esa negociación, prevista para dentro de unos meses, se estanca y no llega a buen puerto que se valorarán ofertas por un traspaso.
Koeman apostará por Alejandro Baldé, si sigue
En cualquier caso, el lateral izquierdo no es una posición prioritaria para ninguno de los tres candidatos por lo que no es probable que este verano haya ofertas procedentes de Can Barça. Además en ese puesto las opciones son varias. Jordi Alba está sobradamente asentado y el que sea investido nuevo presidente tendrá que tomar decisiones con Junior Firpo, a quien se intentó dar salida del club en verano y en invierno sin éxito, y Miranda. Éste, mientras tanto, tiene ya un preacuerdo firmado por tres campañas con el Betis si el Barça no cuenta con él.
Después está Ronald Koeman que está prendado de Alejandro Baldé (Barcelona, 18 de octubre de 2003). El jovencísmo lateral del filial está cuajando una notable temporada en Segunda ‘B’, donde ya se ha asentado. Si sigue como entrenador -contrato tiene, aunque dependerá de los acontecimientos- Koeman le dará la alternativa para que vaya entrando poco a poco en el primer equipo. Una circunstancia más que hace que Lim, si quiere vender a Gayá, tenga que encontrar otro comprador.