El Girona va a presentar esta semana una nueva queja por los arbitrajes, especialmente lo que implica al VAR, que está recibiendo esta temporada. El enfado en el club blanc-i-vermell es muy grande. Ya hace tiempo el club pidió, por los cauces que deben hacerse, una explicación o aclaración de varias acciones polémicas. Como es habitual, recibió una respuesta que en modo alguno satisfizo, pero que no quedaba otro remedio que aceptar.
Sin embargo ahora el club ya vuelve a colmar su paciencia. El partido frente a la UD Almería con el gol de Umar Sadiq, al que las imágenes y las líneas trazadas por @natxotellado dejan en posición, por muy poco, de fuera de juego ha vuelto a elevar el enfado. Durante la retransmisión no se mostró la imagen con las líneas trazadas por la sala VOR como es habitual; lo que sin duda elevó más el escepticismo. De hecho el gol tardó más de cinco minutos en ser validado.
Pérez Pallas, en el ojo del huracán
Pero las quejas del Girona van, sobre todo, contra un nombre en particular: David Pérez Pallas. Los ‘choques’ que han tenido históricamente con el colegiado vigués, que ahora solo desempeña labores en las salas VOR han sido notorias y con el club poco bien parado. El colegiado vigués fue quién avisó a López Toca que la entrada de Stuani en el partido de vuelta de la final del playoff de ascenso del curso pasado debía ser de tarjeta roja. Una acción que fue decisiva para privarles del ascenso.
Pero es que la anterior queja presentada por el club y a la que antes se hacía mención, fue también con Pérez Pallas ejerciendo como árbitro de VAR. En el encuentro frente al CD Leganés, que acabó 0-2, se marcó un fuera de juego milimétrico de Santi Bueno. Una decisión que impidió poner el 1-1 en aquel partido y también después de esperar cinco minutos la decisión. Sin embargo, en el de Sadiq este domingo la decisión fue darlo por válido. Una decisión que ha colmado su paciencia de nuevo con Pérez Pallas.