Lucho García, el cierre perimetral del Dépor
Desde que Rubén de la Barrera le dio las 'llaves' de la portería, el colombiano cedido por el Sevilla ha echado el candado
La llegada de Rubén de la Barrera al banquillo herculino en enero no generó, de mano, el revulsivo esperado. Tras el relevo del banquillo el equipo herculino adolecía de la misma fragilidad en las áreas que mostraba con Fernando Vázquez. Pero bien entrado el mes de febrero, el coruñés dio la alternativa en la portería. Una de esas decisiones que muchas veces se hacen casi a la desesperada buscando una reacción tuvo efecto. Lucho García (Barranquilla, Colombia, 20 de marzo de 1998) entró al once del Dépor y desde ese encuentro el colombiano solo ha recogido un balón de su red.
Un gol recibido en cuatro partidos hablan de la mejoría que ha supuesto el cambio en la portería, pero no ya porque Carlos Abad fuese el problema, que no lo era. Sino porque con el colombiano el Dépor ha mejorado mucho en defensa. Lucho García ya había jugado los dos partidos de Copa en los que dejó también muy buenas actuaciones, algo que ahora ha trasladado a la competición liguera. La zaga parece sentirse mucho más segura con él bajo palos y éste ha correspondido con algunas paradas muy notables (mismamente frente al Pontevedra dos suyas evitaron un empate cantado en el tramo final del choque).
El jugador llegó en verano procedente del Sevilla Atlético y firmó por tres campañas. El Dépor apostó a futuro por él con un contrato largo para tratarse de Segunda ‘B’ y ahora el internacional cafetero en categorías inferiores está respondiendo. Falta ver hasta donde puede llegar, pero sus actuaciones anticipan un notable futuro por delante.