Valencia Basket acumula más bajas en la derrota frente FCB
El mejor del partido sería Álex Abrines con un porcentaje brillante de triples, 7/9 para 23 puntos. Hermannsson y Tobey acabarían lesionados.
Valencia Basket y FC Barcelona se veían las caras por cuarta vez esta temporada entre la Liga Endesa y la Turkish Airlines Euroleague. El balance era favorable al club barcelonés con sus dos victorias en la competición frente a la derrota sufrida en el Palau Blaugrana en la liga doméstica.
El desafío para el equipo local no solo consistía en enfrentarse al líder destacado de la Euroliga, sino que además, debía hacerlo sin sus dos mayores referentes sobre el parqué por lesión: Bojan Dubljevic y Sam Van Rossom. El base belga sufrió un esguince de tobillo en la victoria taronja del pasado en Rusia contra el Khimki Moscow Region. Además, los de Jaume Ponsarnau buscarían resarcirse de la dura derrota de la semana pasada contra el colista de la ACB el Acunsa GBC.
Intercambio de golpes a pocas revoluciones
A quien también se echaría de menos desde el momento inicial de las espectaculares presentaciones de los jugadores sería al calor del público de la Fonteta, que sin él haría que tal espectáculo se quedara menos brillante. Así pues Louis Labeyrie estrenaría el marcador ante las frías miradas del público virtual de las pantallas y los pocos profesionales que asistieron al pabellón. Se hizo de esperar una respuesta anotadora, parecía que los aros se habían empequeñecido. No sería hasta pasados tres minutos que Pierre Oriola, ex Valencia Basket, anotara la segunda canasta del partido.
Los equipos no conseguían entrar en partido y las defensas se imponían hasta que Víctor Claver, otro ex jugador taronja, consiguiera fusilar la red local con un triple. Por parte de Valencia Basket, Derrick Williams se mostraría más enérgico y voluntarioso que acertado en sus entradas a canasta. Con los primeros cambios del encuentro, Mike Tobey lograba un respiro para los suyos con un 2+1. Sin embargo, Nikola Mirotic sí empezaba a carburar en la función anotadora para liderar a los suyos. No obstante, los locales daban la réplica desde la muñeca de Joan Sastre que enviaba un mensaje a sus rivales de que no lo iban a tener nada fácil. Así pues, Sarunas Jasikevicius pedía tiempo muerto para reajustar ideas mientras el DJ de la Fonteta (DJ Fenoca) amenizaba la pausa con música épica. Finalmente, el primer cuarto acabaría con un intercambio de canastas entre Tobey y Leo Westemann. La mala noticia para los locales era la lesión en la pierna derecha de Martin Hermannsson que le impediera volver al partido.
Final 1Q
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⌚ 0s 1Q
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Mucho Barça para tanto contratiempo
El segundo imparcial empezó como el primero: la pólvora mojada por parte de ambos quintetos y el balón sin querer entrar. Seguramente, el esfuerzo hecho unos pocos días antes en la Euroliga hacía que la gestión del combustible energético fuera un factor clave en el partido. Del mismo modo, el primer anotador volvería a ser el francés Labeyrie, esta vez desde la línea de tres.
La baja de Hermannsson (el segundo base lesionado de VBC) empezaba a notarse. Guillem Vives no podía disputar todos los minutos (y menos aún cuando hace poco salió de lesión). Esto hacía que al equipo valenciano empezara a ponerse complicado la dirección de juego y la culpa no la tenían los timoneles improvisados como Fernando San Emeterio o Klemen Prepelic. Las malditas lesiones que también cumplen su función en el mundo del deporte.
Sabedor de los peores momentos del Valencia Basket sobre el parqué, tanto FC Barcelona como su entrenador elevaron las revoluciones (los gritos y quejas de este último retumbaban por todos los rincones del pabellón). Eso sí, no serían los únicos, pues Chechu Mulero (director deportivo del VBC) les hacía la competencia con sus ánimos desde la grada. Estos acapararon parte de los focos de protagonismo porque el juego en la pista era trabado y con muchas imprecisiones hasta que, nuevamente, Mirotic dijo «basta» y con una gran canasta por línea de fondo y una asistencia a Oriola provocó el tiempo muerto de Ponsarnau y la mayor ventaja en el marcador hasta el momento: 21-30. Tras este se viviría un nuevo periodo de réplicas anotadoras en el que los árbitros advirtieron a ambos entrenadores por sus reiteradas protestas.
🔥 Juego en EQUIPO
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Gritos, quejas, reclamaciones y más lesiones
Tras el paso de vestuarios, Valencia Basket subió la intensidad defensiva y fruto de ello consiguió opciones de contraataque. En uno de ellos, Nikola Kalinic lograba un poderoso mate para levantar los ánimos de sus compañeros y Vives le complementaba con un gran triple. Así pues, el Barça ya no se mostraba tan cómodo y, a pesar de que Mirotic continuaba a su buen nivel, Jasikevicius no quería ni un ápice de relajación de los suyos pidiendo un tiempo muerto porque no se fiaba de los taronja. Poca influencia inicial dado que Tobey taponaba a Adam Hanga e inmediatamente, el técnico lituano lo enviaba al banquillo mientras seguía reclamando al trío arbitral. El enfado de técnico blaugrana era evidente y lógico porque su equipo sumaba la mitad de pérdidas de todo el partido en tan solo la primera mitad del tercer cuarto (6/12).
A pesar del buen momento de los locales, el FC Barcelona hizo gala de su nivel e igualó la intensidad defensiva a la par que su calidad ofensiva les permitía volver a poner una diferencia de 10 puntos en el marcador. Del mismo modo que lo anteriormente descrito, Jaume Ponsarnau también se las tendría con los ábitros al no estar de acuerdo con la decisión de pitarle un 2+1 a favor de Adam Hanga. Tarde difícil para ellos con el ambiente caldeado desde los dos banquillos. Además, nuevamente Valencia Basket sufriría otro percance en forma de más molestias físicas, esta vez por parte del pívot estadounidense, Mike Tobey (máximo anotador de su equipo).
🔨 El MARTILLAZO de Nikola Kalinic#LigaEndesa
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Querer y no poder
Todos los contratiempos estaban siendo un lastre demasiado pesado de digerir por parte de la plantilla de Valencia Basket. Además, Jaime Pradilla el prometedor pívot aragonés, sí recibiría una rigurosa falta antideportiva al interpretarse que no iba con intención de disputar el balón. La frustración de los locales era un añadido con el que tenían que lidiar. Para colmo de sus males, Ponsarnau también recibiría otra técnica por reclamar un 2+1, precisamente, de Pradilla. En esta ocasión los colegiados decidieron aplicar otros criterios.
Mentalmente eran demasiados obstáculos para Valencia Basket y su estado emocional estaba demasiado alterado para centrarse en un partido que estaba muy cuesta arriba y a 14 puntos de su rival. Álex Abrines continuaría haciendo daño desde el perímetro siendo el jugador más destacado del encuentro en cuanto anotación (23 puntos con 7/9 en triples).
A pesar de la buena imagen, en cuanto actitud y esfuerzo, Valencia Basket vuelve a sufrir una derrota en la que lo más doloroso serán sin duda alguna acumular más bajas de cara al trascendental partido de Euroliga frente al Bayern de Munich del próximo día 25 donde se juega gran parte de los objetivos de la temporada para clasificar al TOP8 y volver así a la máxima competición europea el año que viene.
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