España apacigua los ánimos ante Kosovo
El combinado español ganó con tres goles de la "nueva generación" de atacantes nacionales. Besar Halimi anotó el gol visitante de una Kosovo que no quiso el balón.
Partido que, a priori, era un trámite para los chicos de Luis Enrique. Sin embargo, tras los últimos resultados cosechados, las dudas sobrevolaban la concentración de «La Roja» y ganar con buenas sensaciones era clave para la selección de cara al Europeo de este verano.
Dani Olmo y Ferrán Torres para callar bocas
Y es que estos dos jugadores encarrilaron una victoria mucho más importante de lo que podría parecer al enfrentarse a un asequible rival. España ya están en la primera posición de su grupo. Y no sería otro que el goleador del anterior partido. Dani Olmo colocó la pelota en la mismísima escuadra de la portería de La Cartuja con una perfecta rosca desde dentro del área para adelantar al combinado nacional.
Tres minutos más tarde, otro de los jóvenes que viene pisando fuerte pondría distancia de por medio en el marcador. Ferrán Torres cruzó la pelota al segundo palo de Ujkani para llevar el partido al descanso con una cómoda pero insegura diferencia en el marcador.
España y la polémica con los cambios
El partido tenía poco que descubrir. Una selección muy inferior, que no quería el balón y una selección española que buscaba la portería con insistencia (más de veinte tiros en los noventa minutos de partido). El gol de la intranquilidad lo puso Besar Halimi en una pésima salida de Unai Simón. El jugador de Kosovo clavó el balón desde 40 metros con una efectiva vaselina que fue incapaz de sacar para toda la zaga española.
Gerard Moreno volvió a restaurar la tranquilidad minutos más tarde con un potente cabezazo a saque de esquina, sorteando a todos los rivales. El propio Gerard pudo conseguir su doblete, pero no llegó a tocar con nitidez un balón claro en boca de gol.
En el minuto 85 llegó uno de los polémicos cambios de la selección española. Sergio Ramos, que no estaba al cien por cien, entró por Eric García, siendo una sustitución evitable ya que cualquier despiste defensivo podría haberle costado caro al combinado nacional. Final con buenas sensaciones para los de Luis Enrique, que regresan a sus competiciones domésticas.