Según informaba ayer Sky Italia, el Inter de Milán quiere llevarse a Marcos Acuña desde el Sánchez Pizjuán a la capital de la Lombardía. El lateral argentino, que llegó a Sevilla a cambio de diez millones de euros, está cuajando una notable temporada en el equipo sevillista. Su potencia y capacidad ofensiva gusta en el cuadro neroazzurro que estudia lanzar una oferta por él para llevárselo el próximo verano.
El que, salvo sorpresa, acabará siendo campeón de la Serie A valora ofrecer unos 15 millones de euros y la cesión del brasileño Henrique Dalbert. Éste estuvo cerca de recalar en el Real Valladolid como cedido el pasado mercado de invierno. Cedido en el Stade Rennais de la Ligue 1, Dalbert no quiso salir del equipo bretón para recalar en el cuadro blanquivioleta a pesar de que no goza de la confianza del entrenador del Rennes, Bruno Genésio.
Sin embargo parece muy improbable que esa oferta siquiera llegue a Sevilla. Al menos en esos términos. Con una cláusula de rescisión de 52 millones de euros y contrato hasta 2024, el Sevilla no parece probable aceptase. Máxime cuando Escudero apunta a abandonar el club en verano y el fichaje de otro lateral zurdo apunta a estar entre los movimientos que Monchi va a realizar. Y sobre todo, porque si algo ha caracterizado al de San Fernando es no vender barato a un jugador titular, algo que Acuña es de forma casi indiscutible.