Osasuna vs Getafe: un fantástico remedio para el insomnio
A veces hay 0-0 muy entretenidos... pero este no fue el caso. Osasuna y Getafe empataron sin goles en un partido con muy pocas ocasiones, prolongando la mala dinámica de ambos conjuntos. La noticia positiva fue el regreso del Chimy Ávila a los terrenos de juego.
Empezaremos está crónica por el minuto 23. Sé que es algo inisual, pero enseguida entenderán por qué. En ese minuto, Rubén García estuvo a punto de controlar un balón y quedarse solo delante de David Soria tras un mal despeje de Djené. En la siguiente jugada, Arrambarri recogió un balón en la frontal del área y lanzó un misil que Sergio Herrera envió a córner con dificultad. Tras ese mismo saque de esquina, los jugadores del Getafe pidieron penalti por mano de David García, pero González Fuertes indicó que continuase el juego. Y hasta aquí el relato de sucesos reseñables durante los primeros cuarenta y cinco minutos.
En el tiempo restante, 20 faltas entre ambos equipos (12 de Osasuna y 8 del Getafe), 28 saques de banda, y un par de fueras de juego que provocan un tiempo de juego efectivo que desconozco y que no quiero averiguar, ante el riesgo querer pegarme cabezazos contra la pared. No sucedió nada más. Dos remates de Timor que no cogieron portería, y una tarjeta amarilla para Chakla en la primera acción del encuentro.
A decir verdad, nadie esperaba fútbol de fantasía entre un conjunto local que llevaba un gol en los últimos seis partidos, y un equipo visitante que sólo había conseguido ganar uno de sus últimos diez encuentros, pero el primer tiempo, con rojillos y azulones buscando únicamente el juego directo para hacer sufrir a su rival, solo consiguió hacer sufrir a los espectadores.
Solo hubo que esperar dos minutos para que la segunda parte mostrara algo más que la primera mitad, lo cuál tampoco era difiícil. Una buena combinación etnre Cucurella y Aleña finalizó con remate del catalán, pero su chut fue muy centrado. Parecía que el partido podría animarse un poco más… pero no. El juego solo tenía algo de continuidad cuando aparecían Aleñá en el Getafe o Rubén García en Osasuna… pero apenas intervinieron.
Arrasate intentó cambiar las cosas, primero dando entrada a Budimir y Roberto Torres, y más tarde a quien todo aficionado navarro lleva esperando durante meses: el Chimy Ávila volvió a pisar El Sadar más de un año más tarde.
El primer remate a puerta de Osasuna llegó en el minuto 90, con un disparo ajustado de Budimir que David Soria despejó con brillantez. Chimy Ávila tendría la última del encuentro, pero su remate fue blando, a las manos del arquero azulón.
El punto sumado tras este empate deja a ambos conjuntos tal y como estaban, parejos en la tabla, lejos del descenso, pero sin poder estar tranquilos todavía. Por cierto, si quieren saber el dato final de faltas señaladas: fueron 39.