El United encarrila la eliminatoria en Los Cármenes
El penalti anotado por Bruno Fernandes en el último minuto de partido deja muy complicada la eliminatoria para los de Diego Martínez. La proeza en Old Trafford, la última bala para los granadinistas si quieren acceder a las semis de Europa League.
Independientemente del resultado, lo vivido en el césped de Los Cármenes en particular y en la comunidad de Andalucía en general ha sido histórico. Una región, una ciudad volcada con un equipo que sabe perfectamente lo que es sufrir. Y por ello la derrota dolerá en el vestuario rojiblanco, pero el orgullo de su afición se mantiene por todo lo alto.
Al hueco hizo daño el ManU
El comienzo de partido fue para el conjunto local. Los de Diego Martínez sabían lo que se jugaban y salieron con todo al tapete del Nuevo Los Cármenes. El United, algo desubicado, intentaba frenar los primeros arreones rojiblancos como podía. Poco a poco, los «red devils» tomaron la manija del encuentro, aunque la posesión no les terminaba de beneficiar, siendo un equipo que juega más al espacio que con la pelota en corto.
El primero de los visitantes llegó en una jugada propia de los pupilos de Solskjaer. Lindelof visionó a Rashford que echó a correr y se plantó frente a Rui Silva, que poco pudo hacer para evitar el primer tanto. No solo no se desanimó el conjunto andaluz, sino que fue a buscar el empate y Yangel Herrera estuvo cerca de encontrarlo pero la portería repelió su remate. El partido se iba con desventaja para el Granada, pero el partido estaba siendo bastante igualado.
Bruno Fernandes y los once metros
La segunda mitad comenzó algo más calmada. El transcurso del partido beneficiaba a los mancunianos, que sabían que un tanto fuera de casa dejaba más que encarrilada la eliminatoria. Cuando quedaban veinte minutos para el pitido final los locales se animaron. Soldado empezó probando con un disparo seco que se marchó por muy poco. Yangel Herrera también lo intentó, aunque la bola se marchó fuera del marco de De Gea, que estaba viéndose acorralado poco a poco.
Cuando todo parecía presagiar un 0-1, las oportunidades del Granada comenzaron a disminuir gracias a un polémico penalti de Eteki. Bruno Fernandes se enfrentaba a su compatriota desde los once metros. Rui Silva lo hizo todo bien adivinando y tocando el balón, pero el esférico finalmente decidió entrar y el gol subió al marcador. Dos goles como mínimo necesitará anotar el Granada en suelo británico si quiere seguir con su sobresaliente temporada en competición europea.