El mediocampo volverá a ser en el verano una de las líneas que tanto en el Wanda Metropolitano como en el Ramón Sánchez-Pizjuán serán susceptibles de cambios. Independientemente de las, cada mía menos probables, salidas a modo de traspaso de Saúl Ñíguez o Joan Jordán, hay que estar siempre alerta. Además del siempre vigente cambio generacional, está el asunto de cubrir huecos que jugadores con poca participación o rendimiento decepcionante. Algo que Andrea Berta y Monchi tienen más que presente junto a sus entrenadores.
De esta forma, el Sevilla empieza a planear el relevo a Fernando, de 34 años en verano, mientras que el Atlético el de Torreira y Héctor Herrera. El charrúa ha mostrado su voluntad de volver a Sudamérica y el mexicano la de volver al Porto o, cuanto menos, poder gozar de más minutos en otro club diferente al colchonero. Ahí es donde aparece el nombre de Harry Winks (Hemel Hempstead, Inglaterra, 2 de febrero de 1996) que adelante el tabloide británico The Mirror.
Su llegada a modo de traspaso parece complicada. No está la economía de ambos clubes para desembolsos por jugadores que, si llegan, no lo hacen con la categoría de intocables. Pero en el Tottenham deben aligerar su plantilla para poder fichar. Y Winks, que aunque sí tiene bastante participación con José Mourinho no es tampoco titular indiscutible en el Tottenham, sino que es más un perfil de jugador reserva.
Acumula un total de 1.683 minutos en 24 partidos, pero entre 4 competiciones. En la Premier apenas supera los 400 minutos, ya que su participación es mayor en el resto de competiciones que ha disputado el cuadro londinense. Especialmente en la Europa League, donde el club fue eliminado en octavos de final por el Dinamo Zagreb.