Completada la jornada 36 en lo que a los cuatro primeros de la tabla se refiere, el Espanyol ve como el primer match-ball por el ascenso está a la vista. Quedan aún seis jornadas, pero lo cierto es que los pericos tendrán la oportunidad de certificar ese ascenso con cinco jornadas de margen el próximo fin de semana. Es complicado; habida cuenta de que no dependen de sí mismos. Pero la opción de que ocurra ya es real.
El conjunto de Vicente Moreno lo primero que debe lograr es ganar su partido. Pero a ese partido, contra un Málaga virtualmente salvado y sin opciones casi de poder alcanzar la promoción, puede llegar ya sabiendo que si puede ascender o no. Porque además de la victoria blanquiazul, uno de los condicionantes es que la UD Almería caiga en su partido (sábado, 18:15h) con el Real Oviedo. Si los indálicos puntúan, el alirón tendrá que esperar.
Si esa primera condición se da y la segunda que es la que depende del propio Espanyol de ganar también, quedará la tercera. Esa se podrá dar justo a la conclusión del partido en el RCDE Stadium (domingo, 16:00h) y es que el Sporting gane en Butarque al CD Leganés (domingo, 18:15h). O lo que es lo mismo, que David Gallego le eche la mejor de las manos al equipo de toda su vida. La razón por la que al cuadro perico no le sirve el empate de los pepineros es que perdería con ellos tanto un desempate individual como un triple con el Almería y Leganés.