La derrota el pasado domingo en Los Cármenes frente al Cádiz supone un frenazo a las aspiraciones europeas del Granada por segundo año consecutivo. Esas que habían aumentado tras su sonora victoria en el Camp Nou ante el FC Barcelona y ahora han vuelto a ponerse muy complicadas. Con solo 12 puntos en juego, el equipo nazarí está a seis puntos de la séptima plaza, que es ahora mismo del Betis. Los verdiblancos son su próximo rival en el Benito Villamarín y cualquier opción real que puedan tener de lograrlo pasa por vencer en el estadio verdiblanco. Pero ¿y después qué?
Suponiendo que el Granada logre vencer en ese partido (lo que además le supondrá confirmar el golaveraje particular a su favor) se quedará a un solo partido con tres por disputar. Sin duda abriría esa lucha y metería el verdadero miedo en el cuerpo al equipo bético. Tras ese encuentro el próximo lunes, el conjunto de Diego Martínez se la jugará frente al Real Madrid, Getafe y Alavés. Un calendario ciertamente difícil contra tres equipos que están inmersos en la pelea por el título y la permanencia respectivamente.
El Betis no tendrá tampoco un calendario sencillo. Deberá jugar frente a Eibar y Huesca, equipos que apuran sus opciones de salvarse. Si es cierto que en la última jornada visita un estadio de Balaídos donde el Celta ya no tendrá nada en juego. Sin embargo por ahora no se puede mirar más allá del Benito Villamarín. Lunes, 10 de mayo, 21:00 horas. El partido que decidirá si el Granada sigue luchando o empieza a pedirse las vacaciones anticipadas.