Maxi deja al Valladolid en estado de alarma

El Valladolid visitaba Mestalla para enfrentarse a un Valencia que tras una semana convulsa volvía a recurrir a Voro para enderezar su situación. Por su parte el Valladolid llegaba en una complicada situación. Aunque los rivales por la permanencia habían pinchado el sábado, la victoria del Éibar obligaba a los de Sergio a lograr los tres puntos que permitieran afrontar las tres últimas jornadas con cuatro puntos sobre el descenso.

Conscientes de la importancia del partido, los de Sergio salieron mucho más enchufados. Con la presencia de Jota en sustitución del lesionado Orellana, los pucelanos se adueñaron del balón y no tardaron en llegar las primeras ocasiones en un doble remate del portugués y de Olaza a los que respondió de manera notable Cillesen. Con Míchel, Alcaraz y Mesa en la sala de máquinas los visitantes dominaban a un Valencia con muchas dudas. Voro en su nuevo debut optó por dar la titularidad a Kang in Lee,  que apenas contaba para Gracia y que anotó el gol de la victoria el año pasado.

Se encontraban muy cómodo el Valladolid con el balón, ya que los locales apenas presionaban, y sin balón porque gracias a la presión alta recuperaban rápido. Asi los pucelanos acumulaban once remates en el primer tiempo. Enfrente el Valencia acusaba el cambio de sistema y por supuesto la situación del club. El partido parecía abocado al empate sin goles ya que aunque el Valladolid era superior le faltaba gol,y el Valencia no daba sensación de peligro. Pero lo que son las cosas, en la única jugada trenzada con algo de sentido el Valencia lograba adelantarse por medio de Maxi. Excesivo castigo para un Valladolid que estaba poniendo mucho más en el campo y que aún sería mayor porque en la reanudación volvería a marcar el uruguayo. Dos ocasiones, dos goles… Así de injusto es el fútbol.

Los goles no cambiaron el panorama. El Valladolid acentuó aún más su dominio aunque ahora los locales se empleaban con más contundencia en defensa y las contras eran mucho más peligrosas. El Valladolid se fue con todo arriba pero sin remate y los cambios no mejoraron la estadística.

Por su parte los locales buscaban la contra que asestara el golpe definitivo al Valladolid. Y ese gol llegaría a dos minutos del final por mediación de Correia que remató de cabeza un buen servicio de Cheryshev. Excesivo marcador para un Valladolid que mereció más en la primera parte pero que en la segunda careció de remate. Buen debut de Voro, con más goles que juego y que dejan al Valencia con la permanencia asegurada. El Valladolid a pesar de seguir fuera del descenso desperdició una buena oportunidad para poner distancia y le esperan 3 jornadas de mucho sufrimiento.