Al llegar a este punto de la temporada, los partidos ya van siendo más igualados y se nota que ganar es la única opción que sirve. Hoy con el Ibiza-Castilla se vio un partido a la altura de la competición. El resultado reflejó perfectamente lo que se vio en el césped, aunque en algunos instantes el Ibiza hiciera más méritos para conseguir el tanto de la victoria. Pero con ese cero a cero los baleares recurren a su primera plaza en la clasificación general del grupo III frente a la tercera del Castilla en el grupo V para pasar a la siguiente fase.
Ese tanto tan buscado por ambos conjuntos acabó llegando pero no contó por un fuera de juego muy justo. Antes de eso pasaron una infinidad de cosas. Empezando por destacar los papeles de Goldar que estaba para rematar todo lo que podía y de Mario Gila, que evitaba que que el jugador isleño tuviera algo que rematar. Ese rifirrafe continuo fue de lo mejor del partido.
A niveles más generales, las ansias de gol de ambos conjuntos estuvo presente desde el minuto cero de partido. Ese gol que tan pronto se hiciera cambiaría todo el partido, aunque ese mismo gol se negaba a entrar. La verdad es que no era por falta de ocasiones. El Ibiza fue el que golpeó primero. Castel tuvo una ocasión muy clara pero Davo no llegó a finalizar bien. Poco después llegó la primera caída y la primera polémica, aunque no la única. Hugo Duro, cuando estaba a punto de rematar a puerta, cayó dentro del área al chocar con el guardameta del Ibiza pero el colegiado decretó que no pasaba nada, cosa que el blanquillo blanco protestó y el celeste aprobó.
Polémicas a parte, las ocasiones seguían apareciendo pero tanto a unos como a los otros les faltaba la finalización. El Ibiza por su parte destacaba algo más en cuanto al peligro que generaba y Fuidias fue teniendo más trabajo al paso de los minutos. Aunque la ocasión más clara de la primera mitad llegó desde el conjunto blanco que hoy vestía de rosa. Arribas se marcó una carrera y fue derribando rivales a su paso, aunque como de normal esa ocasión no llegó a tocar portería.
La tensión iba subiendo cuando aún no sabían el largo rato que tendrían que soportarse los unos a los otros. Esos niveles altos de euforia se fueron trasladando en protestas tontas y en algún que otro empujón que tuvo que saciar el colegiado con tarjetas.
Cuando parecía que el Ibiza estaba a punto de anotar el tanto que le acercaría a la fase final, el Real Madrid Castilla recuperaba y generaba otra acción en la que perfectamente podía llegar ese gol tan ansiado. Pero los saques de esquina parecía que tendrían un papel fundamental para el desarrollo del encuentro y Goldar estaría involucrado si Gila le dejaba. Por suerte de los blancos el defensa madridista estuvo a la altura y el tanto no llegó desde Goldar, aunque cerca estuvo de llegar.
En la prorroga fue cuando el Madrid se vio más fuera que dentro de esa fase final por tres motivos. El primero era que si no anotaban el Ibiza haría buena la clasificación y pasaría sin la necesidad de penaltis. La segunda, esa ocasión de de Rodado que tuvieron que salvar entre Mario Gila y Fuidias casi sobre la línea de gol. Y, la tercera, ese tanto anulado que tanto dará que hablar porque unos ven el fuera de juego y los otros no. Sea como fuere, la decisión del árbitro es la que es y con ese cero a cero final el Ibiza estará en la fase final de los Play-Off de ascenso a la Liga SmartBank.