Alma, corazón y vida: ambos equipos lo darán todo

Mañana, sábado día 22 de mayo, tendrá lugar la última final para el conjunto rojiblanco. La hora de la verdad para los de Diego Pablo Simeone, que tienen en sus manos ese título por el que tanto han luchado. Aunque para hacerse con él, los madrileños deben enfrentarse fuera de casa a un Real Valladolid que llega en un momento muy tenso, en puestos de descenso y con la salvación muy complicada.

Por parte del conjunto del Cholo, llegan a este partido sabiendo que si obtienen la victoria, se llevarán el trofeo para la capital y de no ser así, podría conseguirlo el Real Madrid, que tendrían el primer puesto si el Atlético de Madrid cae ante los pucelanos.

Se enfrentan al Real Valladolid teniendo la duda de Thomas Lemar, que tiene dificultades para llegar al encuentro. Además, Kieran Trippier y Renan Lodi, el héroe ante Osasuna, tienen molestias pero aún así,  ambos creen que podrán llegar a esta última jornada. Simeone, ha dejado bien claro que van a ir a por todas y confía en que así sea.

Por otro lado, el Valladolid llega al partido sabiendo que tiene muy complicada la permanencia. Los de Sergio González suman once partidos seguidos sin ganar, y han caído a los puestos de descenso a Segunda División. Sin embargo, el líder no se fía nada de un rival que, de vencer a los ‘colchoneros’, podría conseguir la permanencia.

Se enfrentan al Atlético de Madrid con las bajas de Raúl García Carnero y  Kenan Kodro por lesión, así como la casi segura de Fabián Orellana. Tampoco estarán los sancionados Roberto Jiménez y Rubén Alcaraz, mientras que son duda Javi Sánchez y Bruno González.

Este partido augura la presencia de más de 1.500 aficionados del Atlético de Madrid que, a pesar de la pandemia mundial que estamos viviendo a día de hoy, viajarán juntos para ver si, por undécima vez, su equipo levanta el título de liga. El Frente Atlético lanzó un comunicado citando a todos los hinchas a las 12:30h para tomar la Plaza Mayor de Valladolid y así estar todos juntos antes de que comience el partido.

Los aficionados pucelanos se ven ya en Segunda División —necesitan una triple casualidad de resultados para mantenerse— y cargan contra los propietarios del club. La federación de peñas del Real Valladolid trasladó este jueves su «malestar» por la gestión del presidente y, como medida de protesta, han retirado sus pancartas del estadio. En Zorilla se citará una afición cabreada frente a otra invadida por la euforia.